Quienes conocen a Fernando Blumenkron Escobar coinciden en que es un excelente profesionista pero sobre todo una buena persona. Sin embargo, por azares del destino en los últimos años atraviesa por una mala racha, primero como director del Sistema de Agua Potable de Cuernavaca (SAPAC) y últimamente como secretario técnico del Comité de Participación Ciudadana del Sistema Anticorrupción en Morelos.
Advertimos en su momento que nunca debió aceptar la dirección del SAPAC, no solamente por los antecedentes que existen (una ex directora y varios funcionarios muertos en condiciones sospechosas), sino porque políticamente quedó en medio de un pleito entre el alcalde Antonio Villalobos y el que fuera su jefe de asesores, Omar Maganda, por motivos que sólo ellos conocen.
Ahora, de la misma manera que en su momento Alejandro González Chévez estuvo bajo proceso penal “sin deberla ni temerla”, también quedó como imputado en una denuncia penal interpuesta ayer por un grupo de abogados en contra de Eva Penélope Picazo Hernández, América López Rodríguez, César Santana Nava, Dora Ivonne Rosales Sotelo, América Berenice Jiménez Molina y el propio Blúmenkron.
El documento, del cual tenemos copia con el sello de recibido de la Fiscalía General de Justicia (no la Fiscalía Anticorrupción, a la que parecen no tenerle nada de confianza) menciona que a los antes nombrados se les imputan “ejercicio ilícito del servicio público y coalición de servidores públicos”. La denuncia quedó radicada con el número de carpeta de investigación SC01/8289/2020.
A decir de los denunciantes (Marco Antonio Salgado Gama, Ruth Arias Aceves, Antonio Miranda Sotelo, Ricardo Popoca González y Miguel Ángel Osorio Aldama) Fernando incurrió en los delitos mencionados al aceptar el cargo de secretario técnico del Comité de Participación Ciudadana del Sistema Anticorrupción. Exactamente igual que González Chévez.
La historia ya la conocemos:
Un grupo de nueve ciudadanos –apartidistas y sin cobrar un solo centavo por ello- analizaron los currículums de quienes se inscribieron para ocupar los cinco espacios del Comité de Participación Ciudadana (CPC) y eligieron a Roberto Coranguez Esquivel, Eva Penélope Picazo Hernández, Edgar López Betanzos, María Juana Damiana Herrera Mota y Alejandro Enríquez Hermida, cuya presidencia es rotativa, en ese orden.
Según la ley de la materia, los antes mencionados sí tienen derecho a un sueldo. También contempla la existencia de un Comité Coordinador que está integrado por el presidente del CPC (Roberto Coranguez); el Auditor General de la Entidad Superior de Auditoría y Fiscalización (con una encargada de despacho); el titular de la Fiscalía Anticorrupción, Juan Jesús Salazar Núñez; el titular de la Secretaría de la Contraloría del Poder Ejecutivo Estatal; que era César Santana Nava; la representante del Consejo de la Judicatura estatal (o su equivalente) María del Carmen Verónica Cuevas López (que tampoco está ya); la comisionada presidenta del Instituto Morelense de Información Pública y Estadística, Mireya Arteaga Dirzo (hoy sustituida por Dora Ivonne Rosales Sotelo); el magistrado presidente del Tribunal de Justicia Administrativa del Estado de Morelos; Manuel García Quintanar, y la representante común de los Contralores Municipales del Estado, América Berenice Jiménez Molina (hoy contralora estatal).
En marzo pasado, a través de un comunicado firmado por tres de los cinco integrantes del CPC-SEA, se dio a conocer el relevo de Coránguez Esquivel por “la falta reiterada de actividad sustantiva” y “la omisión en el cumplimento de sus funciones y atribuciones”, por lo que “con el voto de la mayoría de sus integrantes determinaron necesario y justificado declarar la Ausencia del Presidente y proceder a la designación de la Consejera Lic. Penélope Picazo Hernández, como Presidenta Sustituta del Comité de Participación Ciudadana, lo anterior con fundamento en el artículo 19 de la Ley del Sistema Anticorrupción del Estado de Morelos”
“Por lo tanto, Picazo Hernández, será presidente sustituta hasta el 30 de abril, fecha en que culminaba el periodo de su antecesor, y posteriormente se mantendrá en el cargo hasta el 30 de abril de 2021, ya que en orden de prelación le toca asumir la representación del CPC-SEA por un año”, decía el documento.
Tras el “madruguete” de Penélope a Coranguez, entonces se dio la designación del secretario técnico del CPC con el voto de Eva Penélope Picazo Hernández, América López Rodríguez, César Santana Nava, Dora Ivonne Rosales Sotelo, América Berenice Jiménez Molina, sin seguirse el procedimiento establecido por la ley, consumándose así –según los denunciantes- el delito de ejercicio ilícito del servicio público y coalición de servidores públicos.
Es de esperarse que, de la misma manera que la Fiscalía Anticorrupción procedió a investigar y a judicializar la carpeta en contra de González Chévez, en esta ocasión también se ponga a disposición de un juez penal el expediente contra Blumenkron y los demás acusados, para estar en igualdad de circunstancias.
Sin embargo, también existe la posibilidad de que “la manzana de la discordia”, es decir, el Comité de Participación Ciudadana, desaparezca.
La diputada del Partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Ariadna Barrera Vázquez, dejó entrever esa posibilidad el pasado fin de semana en entrevista (tras una conferencia de prensa en torno a la ley Olimpia).
Y es que el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, está convencido de que ese organismo anticorrupción, tanto a nivel nacional como en los estados, “no debería existir, pues sólo causan gastos onerosos y no sirven para nada”.
De darse la desaparición del CPC, sería la segunda vez que el ex diputado priísta Víctor Hugo Manzo Godínez logra meter a su esposa a un órgano de gobierno a cobrar y le dura muy poco el gusto. Primero lo intentó hacer en el IMIPE, donde no fue seleccionada; después logró que quedara en la Comisión Ejecutiva de Atención y Reparación a Víctimas pero sólo estuvo un año pues la desaparecieron porque no tenía razón de existir. Y ahora el CPC-SEA, donde Penélope quería ganar como diputada pero sólo le aprobaron 50 mil pesos mensuales, que pagados en forma retroactiva será una buena lana… mientras le dure.
En el caso de Fernando Blumenkron, parece que la suerte le regresa y ahora está entre los 12 finalistas para ocupar una posición en un órgano relacionado con la materia electoral, que es lo suyo y se lo merece.
Quizás en algunos estados el sistema estatal anticorrupción sí haya servido de algo, pero al menos en lo que a Morelos toca, todos los protagonistas están reprobados.
HASTA MAÑANA.