Tal es el caso de la suerte que ha corrido la aprobación del fideicomiso que ha de administrar los destinos del parque científico y tecnológico cuya infraestructura está prácticamente finalizada en el municipio de Xochitepec; es más, hay ya una lista de empresas, de alta tecnología, en espera de que exista el soporte legal para iniciar los trámites de ocupación de este novedoso espacio.
A lo largo de nuestra historia, es recurrente la mención de la existencia en Morelos de más de 40 centros e institutos de investigación, de la presencia de más de dos mil investigadores; de ellos por lo menos 850 están adscritos al Sistema Nacional de Investigadores del Conacyt. A mayor detalle, la existencia de 258 laboratorios en áreas pertinentes para la industria de biotecnología, ciencias genómicas, química, ciencias de la salud, ciencias de los materiales, nanotecnología, energía y física aplicada, como las sobresalientes.
Ahora bien –y así lo promueve la Secretaría de Desarrollo Económico-- es creciente el número de empresas que desarrollan constantemente innovaciones para incorporarlas a su proceso productivo o están en ese reto; otras que utilizan además un porcentaje significativo de recursos humanos altamente calificados; y por último, explica el folleto promocional, que consideran al conocimiento y la creatividad como sus insumos más valiosos, *dispersar por diferentes zonas de la propia entidad o fuera de ella.
Este parque científico y tecnológico –el cual se entiende en su dimensión y proyección después de visitarlo-- logrará y promoverá la formación de sólidas redes de colaboración entre empresarios, tecnólogos y científicos con el objetivo de detonar nuevas oportunidades, por medio de la innovación y el desarrollo tecnológico.
Desde el segundo piso de unos de los edificios que conforman el conjunto sede, logramos contemplar las cerca de 40 hectáreas que lo albergarán; su espacio urbanizado en una primera etapa ocupará 15 de ellas y estará destinado a empresas que por sus características y dimensiones requieran espacios mayores para la instalación de sus líneas de producción. El titular del ramo, Rafael Tamayo Flores, nos ubica: a partir de que el Congreso del Estado apruebe que la administración y control del parque científico y tecnológico quede en manos del fideicomiso creado para tal efecto, en un periodo que no excederá de tres meses estarán ubicadas las primeras cinco empresas dentro del mismo.
¿Qué ha detenido el que esta aprobación llegue? Simplemente no existe respuesta; la desidia, la incompetencia, la falta de compromiso, los intereses políticos, ahora los electoreros, las aspiraciones inmediatas, el desconocimiento, el desinterés, entre otros muchos factores, de los integrantes del Congreso del Estado son simplemente los elementos que evitan que este detonante económico avance rápidamente.
En una “realidad virtual”, ahora que hablamos de tecnología y los políticos ocupan el término para justificar la existencia de candidatos sin registro, el esquema lógico debiera ser el contrario: que el Congreso apresurara al cumplimiento de los compromisos al Ejecutivo, a su Secretaría de Desarrollo Económico, ante la importancia y trascendencia del proyecto. Los diputados, todos sin excepción, debieran estar, ante la aprobación del esquema de administración propuesto, en el empuje rotundo porque esto fuera ya un hecho.
Pero volvamos a nuestro espacio, a la vida y al hoy. Los diputados en Morelos no han sabido unificar esfuerzos para el beneficio de sus representados. Por supuesto que el tema será abordado y aprobado, tal vez esta misma semana; pero el desgaste, presión, postergación del proyecto no tienen justificación alguna.
Nuestro reconocimiento al Ejecutivo por la iniciativa; la exigencia al Congreso para que les cumpla a sus representados; y al ámbito privado nuestro deseo de que el espacio se aproveche y signifique un detonante económico, laboral de alta calidad y nivel de respeto para el estado de Morelos.
Al aire
Acusamos recibo del amable escrito que nos envía el compañero Efraín Vega Giles, en el cual nos hace referencia al trato que en el sector central de la Procuraduría del estado recibió el también colega Alberto Miranda, ante las agresiones de las que fue víctima en días recientes.
En efecto, como nos explica con detalle el vocero de la PGJ, el propio denunciante explicó –aunque sin detalles-- que el trato que recibió en torno al levantamiento del acta del vehículo robado fue de excelencia; ahora sabemos, como se explica en el escrito, que la directora general de Averiguaciones Previas, Lic. Gabriela Tlalpa Castro, atendió a nuestro compañero.
Sin embargo –así quedó consignado ante los compañeros que le acompañamos a la conferencia de prensa--, el propio Alberto Miranda se quejó del mal trato que recibió en ese mismo espacio, en donde no hubo apoyo solidario. Ya lo escribimos: en el hospital Parres –según relató el agredido-- tampoco pudo levantar la denuncia correspondiente.
No obstante, hacemos llegar una copia del documento recibido al compañero periodista Alberto Miranda, para que como nos lo indica el apreciable Efraín Vega, proceda como él disponga. Nosotros solamente comentamos sobre el relato que ante los medios nos compartió.