Solamente dos oradores en la sesión solemne del Consejo Estatal Electoral: el consejero presidente, Oscar Granat Herrera, y el propio beneficiario de la elección para titular del Ejecutivo para el periodo 2012–2018, Graco Ramírez.
Ambos resaltaron la importancia de la participación de la sociedad en los recientes comicios y la importancia de preservar la tranquilidad en los procesos electorales.
La sede del IEE lució abarrotada. Ahí estaban los cercanos y pueblo afín al hoy triunfador. Aplausos, vivas, gritos de ¡Graco gobernador! Abrazos entre todos, sonrisas y una que otra lágrima.
José Luis Correa, representante del PRD ante la autoridad electoral gestionó que se abrieran las puertas a los seguidores; ya en la mesa del Consejo, demasiado serio y sin regalar una sola sonrisa. Su saludo frío y calculador.
Vimos a vencedores de espacios federales y locales. Podemos resaltar las figuras de Francisco Coronato Rodríguez y Francisco Rodríguez Montero. En curules locales estarán Jordi Messeguer y Fernando Guadarrama, allí los saludamos. Todos ellos disfrutaron el momento y no dejaban escapar el gesto que tiene consigo un futuro promisorio en lo político y en lo económico. Uno de ellos nos confesó que ya inició su campaña para dentro de tres años.
Hoy tampoco aparecieron los próximos senadores Fidel Demédicis Hidalgo y Rabindranath Salazar Solorio; queremos entender por estar atentos al proceso y conteo federal, que será su ámbito de acción. Sin embargo, la cercanía con el conductor estatal la consideramos importante y trascendente.
Jaime Álvarez Cisneros y Luis Machuca, promotores y responsables de la coalición con Movimiento Ciudadano, ocuparon sus lugares desde muy temprano, fueron los primeros en el salón de sesiones. En una segunda fila estratégica; delante de ellos escucharon atentos el desarrollo del orden del día, el candidato triunfador y su familia. Ambos serán actores de alto nivel en la siguiente administración.
No puede soslayarse la presencia de Bulmaro Hernández, líder del Nuevo Grupo Sindical. Su sonrisa y el aprecio que se le mostró lo dice todo. Todavía con el gobierno de Marco Adame y con el que sucederá, de Graco Ramírez, esta agrupación de trabajadores se verá fortalecida. Recuérdese que la Confederación de Trabajadores de México en Morelos es de estirpe priista y ahora se encuentra en una lucha férrea inclusive por el control de ese partido político.
En primera fila, como lo estará en los próximos 6 años, Jorge Messeguer Guillén. Todo apunta para que este personaje encabece primero los trabajos que resulten de los acuerdos entre los gobernadores Constitucional y Electo con los equipos de transición y una vez generado el cambio, asuma la Secretaría de Gobierno. Messeguer es estratega pero más que eso, convencido del espíritu ideológico de izquierda que habrá de encabezar Graco Ramírez.
Apenas la víspera se confirmó el triunfo absoluto de la izquierda en Morelos al hacerse de la totalidad de las diputaciones federales, 13 diputaciones locales, dos senadurías, 13 presidencias municipales y la gubernatura.
Dependerá en mucho el avance en el Estado de que pueda manejarse en bloque la bancada que representa la coalición triunfadora; deberá desarrollarse un calendario de quienes encabezarán los espacios de control que satisfaga a las distintas fuerzas. ¿Quién de los diputados electos tiene ese peso? ¿Quién será el personaje de confianza que, con la independencia que obliga la división de poderes, pueda maniobrar en nombre del titular del Ejecutivo?
Hay un espíritu de izquierda que favoreció el voto; el corredor al que se refirió Graco Ramírez Garrido en campaña -Distrito Federal, Morelos y Guerrero- se concretó. Seguridad, turismo, cultura, desarrollo social, y muchos temas más, podrán ser trabajados entre Miguel Ángel Mancera, el propio Graco y Ángel Aguirre Rivero. Los tres se conocen, respetan y saben que tienen una gran oportunidad para tiempos futuros.
Percibimos un ambiente agradable en la sociedad. Hay esperanza renovada pero a la vez incertidumbre en el tiempo que a nivel federal y local, regrese la paz y haya crecimiento económico en las familias mexicanas.