En efecto, estamos en el proceso de precampañas –así contempladas en el Código Electoral del Estado-- y en su articulado se encuentran exactamente las limitantes, más que las posibilidades, de actuación de quienes deseen ubicarse en esas oportunidades.
Los medios electrónicos de comunicación –radio y televisión-- en sus espacios comerciales tienen una prohibición total; a través de ellos –insistimos, en su nivel comercial-- solamente podrán transmitirse los “anuncios” aprobados y enviados por el Instituto Federal Electoral. En los contenidos de sus programas periodísticos deberán prevalecer la “libertad de expresión y el derecho a la información” por sobre cualquier intento de censura; de la habilidad de los pre y candidatos, dependerá su presencia en ellos.
En la prensa escrita, existe una amplia posibilidad de promoción electoral. Cada uno de los aspirantes puede –con la asesoría legal debida-- promover imagen y mensaje. La regulación más severa es en torno a la promoción de la imagen física –fotografías y nombres-- de los políticos en funciones. Igualmente los contenidos editoriales no pueden tener más límite que la ética, la equidad y el profesionalismo de sus directivos y propietarios.
La nueva vertiente de comunicación que ha dado la internet y las redes sociales genera un gran impacto pero además –por la carencia de normas-- es el único espacio en donde realmente existe una alternativa de libre expresión, difusión y promoción. Sin embargo, los excesos y el mal uso que se hace de ellas son en automático su propia limitante; su credibilidad tiene fronteras exactamente en los mensajes de ataque, de bajo nivel y de ofensa a los personajes. La mayoría de la veces el talento de los creativos y dominadores de la cibernética es desgastado en armar y atacar al contrincante que en privilegiar al actor o actores que se quiere privilegiar.
La publicidad exterior es otra de las alternativas que no puede ni debe ignorarse. Con ella se llega a prácticamente todos los posibles votantes. Nadie sabe quién pasará por debajo de un anuncio espectacular o un pendón, u observará una manta, barda, valla o pinta. Es imposible medir con certeza el nivel socioeconómico, ideología política, pensamiento, origen, edades de quienes circulamos diariamente por calles, avenidas, en la vía pública. Sin embargo, también estos medios de penetración han sido mal utilizados en ataques a terceros, con denostaciones y señalamientos que buscan el maltrato de alguien; solamente la calidad de sus propietarios –que es lo que también se refleja-- puede detener este tipo de campañas que nada bueno le dejan a la sociedad.
La sobrerreglamentación –así lo consideramos-- en materia electoral solamente lleva a ser más víctimas de una cultura de la desconfianza que un privilegio de la democracia; tal vez es un mal necesario al que nosotros mismos nos empujamos ante la educación equívoca que en ese sentido se nos ha dado. Desde pequeños se nos acostumbra a no confiar, ser precavidos y ni siquiera responder el saludo de un desconocido.
Nuestras leyes electorales han permitido que México sea ubicado como un país democrático y hasta es ejemplo mundial; sin embargo, es necesario, y esa será tarea de los próximos legisladores, retirar limitantes exageradas que rayan inclusive en la prohibición de libertades que deben sernos propias a todos. Ya será motivo de análisis en otra entrega.
Por lo pronto, desde ayer primero de enero de 2012, Morelos vive ya –en términos legales-- su proceso electoral y para ello hay normas, reglas y sanciones. Los casos y antecedentes en otras partes de la república deben ser bien analizados y considerados; no debemos permitir que la irresponsabilidad de uno o varios pueda poner en riesgo un proceso que además de caro, es la base de nuestra estabilidad política y social.
Al aire
Abordaremos el tema de la muerte de Porfirio Flores Ayala, presidente municipal de Cuernavaca de 1976 a 1979. Fue estrangulado y arrojado a la alberca de su casa, según las primeras investigaciones; la necropsia arrojó pruebas contundentes.
En nuestra compañía musical, recordaremos el triunfo de la Revolución en Cuba; diferentes cantautores nos remontarán a ese acontecimiento histórico que a la fecha se sostiene como un icono en la forma de gobierno de un país.
Síganos desde las seis y hasta las nueve de la mañana; son 180 minutos de Periodismo Trascendente. La cita es a través de la 103.7 de FM.