Es una institución afianzada porque es producto de un desarrollo institucional de dos décadas, de varios procesos electorales exitosos y porque el órgano directivo -presidido por Leonardo Valdés y los Consejeros Electorales- es gente de probada experiencia, no obstante la integración incompleta del Consejo General y cuestionamientos sobre el esquema de comunicación política.
Esta fortaleza del IFE no tiene duda alguna. Asegura -de entrada- que el IFE llevará a cabo correctamente la organización de las elecciones; sin embargo, no podemos dejar de lado el hecho de que el poder encargado de integrar plenamente al IFE, o se la Cámara de Diputados, por motivos partidistas haya mantenido en vilo la constitución del órgano constitucional del IFE que es el Consejo General.
La designación de los consejeros es una falta de responsabilidad de la Cámara de Diputados y en particular de los particos políticos que ha vuelta la integración del Consejo General, un asunto de regateo y mezquindades. Se debió de haber nombrado en tiempo y forma a los tres Consejeros Electorales con los cuales se integraría plenamente el Consejo. Es de esperar, aunque sea por un momento, que los partidos políticos pongan un interés general por encima de sus intereses particulares, que los han evidenciado ante la opinión pública.
Hoy en día la administración de los procesos electorales exige de parte de quienes detentan cargos de responsabilidad directiva en el IFE y otros organismos de un conocimiento bastante sofisticado y complejo de las distintas tareas y responsabilidades en materia de registro, fiscalización, en materia de medios y propiamente en la organización electoral. Por eso el escenario ideal hubiese sido que los Consejeros se incorporarán al Consejo General en los tiempos que marca la ley para capacitarse y conocer de la materia para sumarse a la dinámica que el IFE ha venido siguiendo desde hace varios meses.
Retos y desafíos electorales en 2012
En términos generales hemos visto que los procesos electorales, inclusivo los más reciente, han trascurrido en paz, con evidentemente hechos lamentables que ha ocurrido como la muerte del candidato del PRI al gobierno de Tamaulipas. Las condiciones de seguridad que hay especialmente en algunas entidades de la República, son una preocupación general del país.
Es, en todo caso, responsabilidad compartida del Estado mexicano más que del IFE, en lo particular, el garantizar condiciones de seguridad para el trascurso del proceso electoral tanto en los periodos de precampaña, las campañas, organización e instalación de las casillas como la jornada de votación que tendrán lugar en 2012.
En un sentido, esperamos que esa colaboración sea eficaz y se incorpore plenamente al IFE a esos trabajos para que el organismo electoral pueda cumplir con su labor en condiciones de seguridad. Y por otro lado, que cada uno de los actores institucionales del Estado mexicano se adscriba a sus funciones establecidas por la Constitución y la ley.
Los organismos electorales en el centro del debate
No podemos asustarnos por el hecho de que haya cuestionamientos y críticas respecto a la operación de las instituciones electorales. Ha sucedido en todos los procesos electorales. Aún cuando en el pasado reciente recordamos procesos electorales exitosos y muy positivos para la consolidación de la democracia en el país, en su momento se registraron escenarios difíciles para las autoridades electorales, que resolvieron problemas de organización al mismo tiempo que atendieron a la opinión pública y a los actores participantes: partidos y candidatos.
Esto es parte de la política. Vivimos en un mundo donde las críticas son constantes. Hoy el IFE, sin embargo, cuenta con una experiencia histórica muy importante que lo avala para poder llevarlo adelante en sus tareas, independientemente de un clima complicado, inmerso en un entorno de y cuestionamientos.
La inseguridad que prevalece en algunas entidades del país representa un elemento adicional. No tiene precedentes en la historia reciente de las elecciones en México. Ojalá que el Estado mexicano en su conjunto, en coordinación con las autoridades electorales no sólo federales sino también de las locales que se van a llevar a cabo de manera concurrente en 2012, haga su tarea y garantice que para los candidatos, partidos y ciudadanos habrá condiciones que permitan una participación activa en paz.
Un punto común que debemos todos compartir medios de comunicación, ciudadanos, partidos, candidatos, es un respeto esencial a la autoridad electoral, que cumple un papel fundamental que todos en México y en el mundo reconocen.
En un escenario donde las autoridades electorales carezcan del apoyo y la credibilidad, tendríamos procesos mucho más complejos, de tal manera que un voto de confianza al IFE, al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), a los organismos electorales locales que organizarán las elecciones concurrentes, es crucial. Eso no quita que en el marco de la libertad de expresión, en el de la competencia política, haya críticas y observaciones. Esperamos que en ese clima avancemos como lo hemos hecho en los últimos 20 años.
Alrededor del País
Financiamiento a la educación.- Acertado y puntual el diagnóstico que hizo la directora general del Instituto Politécnico Nacional (IPN), Yoloxóchitl Bustamante Diez, al término de la sesión solemne del Congreso de Tamaulipas en donde se conmemoró el 75 aniversario de la fundación del IPN: la federación ha descuidado la inversión en educación, principalmente en los niveles de media superior y superior, lo que provoca que jóvenes caigan más fácilmente en actividad delictivas. “Si los jóvenes no tienen oportunidades para estudiar, no tienen oportunidades para trabajar pues obviamente es más fácil que caigan en actividades delictivas que encuentren otro camino o que no sepan juzgar los riesgos y se vayan por esos caminos”.