constantes caída del sistema, interrupción de las llamadas, zonas grises sin suficiente señal, zonas negras sin señal, condiciones ventajosas en los contratos a favor de la empresa; la atención a los usuarios pésima: filas tediosas en los centros de atención, llamadas largas para recibir el apoyo, dónde la regla es: La empresa siempre tiene la razón y si algún usuario se obstina en lo contrario: se le hace incurrir en costos de tiempo y legales tan grandes que desistirá de solicitar lo que le corresponde y para rematar el precio del servicio es caro si se le compara con el de otros países. En resumen el servicio es deficiente, el trato malo y el costo elevado.
En cuanto al mercado de la telefonía móvil, tiene una estructura oligopólica; Telcel con 70 por ciento, Telefónica Movistar el 20 por ciento, Iusacell el 4.4 por ciento y el restante 5.6 por ciento otras compañías. Telcel tiene prácticas dominantes, dicho por todos; y sólo rechazado por Slim, que actúa igual que los políticos corruptos, aunque haya pruebas irrefutables de su abuso su respuesta es única e inamovible: no es cierto, no es cierto y no es cierto.
En esa dinámica Iusacell, buscó como socio capitalista a Televisa, de tal manera que con esa fusión se pudiera enfrentar con éxito el poder dominante de TELCEL; la operación, mil 600 millones de dólares. Lo cual para el mercado de la telefonía móvil es bueno, se promueve la competencia, lo que redundaría en beneficio de los usuarios: menores tarifas y mejor servicio; sin embrago, esa unión tienen repercusiones en otros mercados también oligopólicos, el de la televisión abierta y la información.
El concesionario de TV Azteca, pose una riqueza personal de alrededor de 10 mil millones de dólares, por lo que en estricto sentido el solo tiene la capacidad financiera de fondear el capital que pondría Televisa; además, Azcárraga y Salinas Pliego, estratégicamente anunciaron las intenciones de fusión en fecha recientes, forzando a que la COFECO, autoridad encargada de promover la competencia, tuviera que emitir una resolución si autorizaba o no tal fusión en un año electoral, cuando se va elegir presidente de la república, jefe de Gobierno del D.F., varios gobernadores, la cámara de diputados y senadores. En ese contexto electoral, los políticos están necesitados de cobertura informativa en televisión, ya que estos dos oligopolistas controlan el 93% de la televisión abierta y por lo tanto es el mejor momento para chantajear a la autoridad y a la clase política.
Días antes de la resolución visitaron, al Comisionado Presidente Pérez Mota, Alfonso de Angoitia por Televisa y Pedro Padilla Longoria por TV Azteca. La intención era saber cómo venía la resolución. Una vez publicada ésta, negaba la fusión por las implicaciones que tendría en el mercado oligopólico de la Televisión abierta y de paga. En conclusión, no se iba promover la competencia en el mercado de la telefonía, a costa de generar en la práctica un oligopolio colusivo en la televisión. Pero estos varones, fieles a su estilo, empezaron un ataque despiadado en sus televisoras contra la autoridad encargada de promover la competencia: la acusan de impedirla en el mercado de la telefonía móvil, imputan al comisionado culpas con argumentos baladís, y de paso iniciaron una campaña de desprestigio en contra del dueño del Periódico Reforma; este medio ha mantenido una posición muy crítica con el oligopolio televisivo y relativamente tolerante en contra de los oligopolios de Slim.
El mensaje es claro, el político que se manifieste por romper el oligopolio televisivo recibirá toda la furia de estas dos televisoras. Mientras tanto, la apertura en el importantísimo y clave sector para el desarrollo de país, el de las telecomunicaciones, entrampado. Slim, Salinas Pliego y Azcárraga dispuestos a todo con tal de preservar sus respectivos privilegios, sin importar el daño que generen en la economía del país. Lo peor, hay elementos suficientes para cancelarle a los tres las concesiones que poseen, por su comportamiento anticompetitivo y oligopólico.
Política en los estados
En medio de la controversia y las especulaciones, el priista Fausto Vallejo tomó posesión como gobernador del estado de Michoacán, ya que en amplio sectores de la sociedad michoacana existe la percepción que la mafia intervino en la elección a favor del revolucionario institucional, a grado tal que Leonel Godoy a unos días del terminó de su mandato declaró “Los grupos delincuenciales operaron en favor del PRI” y una vez que entregó el cargo, el flamante ex gobernador, exhibiendo poco tacto político, al día siguiente se reincorporó al Senado, dejando tras de sí un estado endeudado, sumido en la violencia y crisis económica; pareciera que más que la dieta, lo que busca este político es la impunidad que da el cargo.
En Morelos fue seleccionado como candidato de la izquierda al gobierno del Estado el perredista Graco Ramírez, quien es percibido como poco honesto y con un nivel de vida superior al que se puede alcanzar con el salario de político; pero al mismo tiempo como hábil y buen debatiente; y por lo tanto con altas posibilidades de ganar la elección constitucional; sobre todo después del torpe manejo dentro del PRI para seleccionar a su candidato Amado Orihuela y dentro del PAN no hay candidato.
El señor Rafael Cepeda, precandidato por el PRI al gobierno municipal de Cuernavaca realizó una propuesta en materia de empleo tocando desde la formación educativa, pasando por el financiamiento y la comercialización de los productos o servicios. Se puede estar de acuerdo o no con las propuestas de este político, y naturalmente que esta iniciativa se debe mejorar, pero se agradece que haya propuestas y ni duda cabe: hay que promover la generación de empleo.
Estimados lectores hasta el próximo lunes: esta columna se publica en varios periódicos impresos, en el portal electrónico www.poderydinero.com.mx, y nos puede escuchar en http://agencia-informativa-michoacana.aimich.org/, gracias.