Ante tal situación, llama la atención la elección para gobernador de Michoacán a finales del 2011 envuelta en la controversia y donde resultó ganador el priísta Fausto Vallejo y perdió la panista Luisa María Calderón. Sin embargo, el triunfó se sustentó en unos cuantos distritos electorales, particularmente los de la Zona de Tierra Caliente.

Los distritos electorales de Huetamo, Múgica y Apatzingán, más los municipios de Aquila, Chinicuila y Buena Vista, le dieron una votación al priísta de 96 mil 292 votos, mientras que a la panista sólo 38 mil 668, de tal manera que el primero obtuvo una ventaja irreversible de 57 mil 624 votos.  En el resto del estado Fausto Vallejo logró 562 mil 297 sufragios y la panista 567 mil 688. Así, sin contemplar la región de Tierra Caliente, Luisa María Calderón quedó arriba por 5 mil 391 votos. Es de resaltar que el estado está formado por 24 distritos electorales y los que decidieron al triunfador representan menos del 15 por ciento del electorado.

Otros dato sintomático: en seis municipios el PAN no postuló candidatos a presidente municipal por presiones de los grupos delincuenciales. En estos municipios, Aquila, Chinicuila, Buena Vista, Churumuco, La Huacana y Tumbiscatio, Acción Nacional obtuvo 5 mil 900 votos y el Revolucionario Institucional 30 mil 57 votos, una diferencia a favor del PRI de 24 mil 157 votos, por lo que tenemos: menos del tres por ciento del electorado generó el 46 por ciento de los votos con los que ganó el PRI. Un dato que salta a la vista, ya que es una zona de fuerte influencia de los grupos delincuenciales. Por lo que se puede deducir que esta región le impuso gobernador a todo el estado.

Una fotografía que ya se veía venir

Haciendo uso solamente de datos oficiales del Instituto Estatal de Michoacán y con las herramientas que nos proporciona la estadística descriptiva, podemos concluir:

El PRI ganó la gubernatura gracias al voto de la región llamada Tierra  Caliente, donde casualmente hay gran presencia de grupos delincuenciales.

Técnicamente tenemos un dato aberrante, que el tres por ciento del electorado le haya dado una ventaja tan amplia al PRI de 30 mil 057 votos contra 5 mil 900 al PAN, una proporción de 5.1 votos priístas por uno panista, cuando en el resto del estado quedaron prácticamente empatados. Coloquialmente se diría algo no cuadra o hay gato encerrado.

En los distritos 22, 23 y 24 en la elección del 2007 el PRI obtuvo 48 mil 794, y en el 2011 creció como la espuma 81 mil 296. Hay indicios que tan sólo en esos tres distritos electorales los Caballeros Templarios controlan la nada despreciable cifra de más de 32 mil votos, suficientes para hacer ganar varios diputados locales, federales, presidentes municipales y hasta gobernador. ¿Si nuestra corrupta clase política usa el poder que tiene en su beneficio personal, porque estos Caballeros no lo habrían de usar? máxime que los Templarios no van a buscar a los políticos, son estos últimos que se adentran a las zonas serranas a mendigar el apoyo de esto grupos.

Un último dato, el incremento en la votación a favor del PRI de 2007 a 2011 en más de 32 mil votos se refuerza con los 30 mil 057 votos que obtuvo el PRI donde no permitieron candidatos del PAN a las presidencias municipales.

Estimados lectores  hasta el próximo lunes. Esta columna  se publica en diversos medios impresos y en la dirección electrónica www.poderydinero.com.mx, Gracias.