En poco más de 150 páginas Von Schirach narra con sensibilidad, y resaltando los detalles reveladores, una colección de punzantes historias reales sobre el inexplicable comportamiento humano, haciendo reflexión en el tema central del libro: la culpa.
En algunos casos veremos al delincuente cien por ciento culpable actuando de manera ventajosa; en otros, el criminal no es declarado culpable, o el sentimiento de culpa actúa con mayor celeridad que la ley. También veremos la culpabilidad del abogado o del juez cuando actúan de forma incorrecta, o del testigo cuando llega hacer alguna declaración en falso; pero en todas ellas el lector hallará los destellos de una honda inteligencia moral y un sigiloso, pero devastador, sentido del humor.
Así, entre otros, conoceremos el caso de un grupo de músicos de pueblo convocados para celebraba los 600 años de vida del lugar y, donde alterados por el excesos de alcohol abusan de una joven mesera casi al punto de quitarle la vida. O el caso de unos adolescentes que en un internado de prestigio casi llegan a asfixiar a un compañero, resultando por accidente la muerte instantánea de una profesora que, por casualidad, atestigua el hecho.
Culpa resulta un libro revelador. Sin abandonar su prosa seca y tajante, pero con una fácil lectura, el autor narra con una habilidad explosiva las diversas historias que resultan tan terribles como fascinantes, transportándonos a un mundo cruel pero real.
Ferdinand von Schirach nació en Múnich en 1964. Desde 1994 ejerce como abogado defensor penalista en Berlín, donde se ha ocupado de algunos de los casos más notorios de los últimos años en Alemania y que más interés han suscitado en la opinión pública. Crímenes, su primera obra literaria, se traducirá a treinta idiomas, y está en ciernes una versión cinematográfica.
La gran casa, de Nicole Krauss
La Gran Casaes una historia con un protagonista inanimado: un escritorio robado que posiblemente perteneció a Federico García Lorca. Objeto que se convierte en la obsesión de las diferentes personas que lo poseen. En Nueva York, una escritora solitaria lo ha usado desde que en 1972 se lo prestara un poeta chileno, Daniel Varsky, quien desapareció en manos de la policía secreta de Pinochet.
Un día, una mujer que dice ser la hija de Varsky reclama el mueble, y la vida de la escritora ya no será la misma. Mientras tanto, al otro lado del Atlántico, en Londres, un hombre descubre el secreto que durante cincuenta años le ha escondido su mujer. Una joven estadounidense que estudia en Oxford entabla amistad con una excéntrica pareja de hermanos cuyo padre es un anticuario israelí especializado en recuperar muebles expropiados por los nazis.
El hilo conductor entre distintas circunstancias y personajes de la novela es este mueble imponente y poderoso porque ese valor le dan sus usuarios. Un escritorio que en palabras de uno de los protagonistas es: «un monstruo grotesco y amenazador», que además tiene diecinueve cajones, de los cuales uno está permanentemente cerrado.
Con delicadeza y maestría literaria, Krauss va tejiendo todos los elementos aparentemente dispares y uniendo una historia que en principio luce fragmentada. De la fascinación a la repulsión que provoca en quienes han convivido con el escritorio, este mueble se convierte en una metáfora de la memoria y de la herencia, narrada a cuatro voces que se vuelve una en el escritorio. La obra de Nicole Krauss describe cómo la pérdida y la memoria son pilares esenciales en la construcción de nuestras vidas, y lo hace con una prosa de formidable intensidad y riqueza emotiva.
Nicole Krauss (Nueva York, 1974) se crió en Long Island y, durante la adolescencia, vivió un año en Ginebra. Graduada por la Universidad de Stanford, hizo sus estudios de posgrado en Oxford y en el Courtauld Institute of Art de Londres. Krauss empezó dedicándose principalmente a la poesía —animada por, entre otros, Joseph Brodsky—, que fue publicada en revistas como Ploughshares o The Paris Review. Su primera novela, Llega un hombre y dice, una historia de ecos kafkianos sobre un hombre que pierde la memoria después de una operación quirúrgica, recabó excelentes críticas. La historia del amor (SALAMANDRA, 2006), su segunda novela, también mereció el reconocimiento de críticos y escritores —entre ellos el Premio Nobel de Literatura J.M. Coetzee— y supuso la confirmación del extraordinario talento de Krauss.
El bote vacío. Sobre once historias Taoistas de Chuang Tse, de Osho
Si la gente sigue chocando y enfadándose contigo, recuerda: ellos no tienen la culpa; tu bote no está vacío. Se enfadan porque tú estás ahí. Si tu bote estuviera vacío, parecerían tontos; si se enfadaran, sería una estupidez .Este símbolo del bote vacío es realmente hermoso. La gente se encoleriza porque estás demasiado presente, porque tienes demasiada substancia; eres tan sólido que ellos no pueden pasar. Y la vida está interrelacionada con todo. Si tú estás excesivamente presente, por todo habrá colisiones, ira, depresión, agresión, violencia. El conflicto continuará.
Osho es un místico contemporáneo cuya vida y enseñanzas han influido a millones de personas de todas las edades y condiciones. Ha sido descrito por el Sunday Times, de Londres, como uno de los mil artífices del siglo XX, y por el Sunday Mid-Day (India), como una de las diez personas Gandhi, Nehru y Buda que han cambiado el destino de la India.
Acerca de su propio trabajo, Osho ha dicho que está ayudando a crear las condiciones para el nacimiento de un nuevo tipo de ser humano.