Entrevistado sobre el tema, antes de la subasta, comentó: “El maestro Marcial Camilo Ayala es uno de los grandes pioneros del arte nahua de Guerrero, su salud está precaria y no hay atención médica como debería de haber.
Felipe Ehrenberg fue el subastador en La Casona y pidió el apoyo del gobernador para que el artista reciba la atención que necesita. (Fotografía: José Antonio Gaspar).
“No hay para él acceso a servicios médicos, la subasta que estamos haciendo es para la hemodiálisis que él requiere. Es una subasta en beneficio del maestro Ayala”, aseguró.
En una carta que invitaba a la subasta del pasado viernes 13 de febrero, los organizadores establecieron: “un grupo de amigos y artistas estamos organizando una subasta solidaria de cuadros a beneficio de don Marcial Camilo Ayala, tlacuilo (pintor= de un pequeño pueblo del alto Balsas, Guerrero, que vive hace mucho tiempo en Cuernavaca”.
Destacaron que “él es un magnífico pintor que tiene obra expuesta permanentemente en el Museo Smithsonian de Washington D.C., pero dado que su salud se ha quebrantado, requiere de sesiones de diálisis semanales en espera del trasplante de un riñón, pero mientras llega, no puede parar su tratamiento”.
Cuando lo entrevisté, informa una de las firmantes de la misiva, “al contemplar admirada sus preciosas pinturas que adornaban las paredes de su humilde casa, le pregunté: ‘¿en qué piensa cuando pinta don Marcial?’ y él me respondió: ‘pinto mis sueños. Me paro de la cama a la hora que sea para que no se me olviden y comienzo a pintarlos’”.
Cabe señalar que los artistas donantes de obra fueron Leonel Maciel, Cisco Jiménez, Adolfo Mexiac, Patricia Salas, Óscar Menéndez, Alejandro Aranda, Felipe Ehrenberg, Dany Hurpin, Eduardo Lugo, Carlos Maciel (Kijano), Enrique TorresAgatón, Juan Machín, Miriam Pérez, entre muchos otros.
Como subastador de las obras donadas y ante el público reunido de manera solidaria en La Casona, Felipe Eheremberg solicitó públicamente la ayuda del gobernador de Morelos, para que don Marcial Camilo Ayala pueda recibir la atención que necesita en estos momentos.