Entre los hallazgos hay trozos de húmero, un fémur y el isquion, además de elementos vertebrales del cuello y la espalda
Un grupo de científicos encabezados por el geólogo chileno Carlos Arévalo desenterró una serie de restos en la década de 1990 cuyas investigaciones en años posteriores acaban de darse a conocer. Un análisis difundido en la revista científica Cretaceous Research arroja la existencia del que habría sido el dinosaurio más grande de Chile.
El equipo de geólogos encontró hace casi cuatro décadas partes del que han llamado el Arackar licanantay.
Sin embargo, no se ha conocido hasta ahora el hallazgo de trozos de húmero, un fémur y el isquion, además de elementos vertebrales del cuello y la espalda. Según los encargados del reciente estudio, se corresponden con fragmentos pertenecientes a un ejemplar en vías de llegar a la adultez. Al parecer, habría alcanzado una longitud de más de seis metros.
Se trata de un titanosaurio herbívoro con una cabeza pequeña, un cuello largo y una espalda más plana de lo habitual. Ahora, los geólogos han podido confirmar que, efectivamente, se trata de una nueva especie. Se estima que el Arackar licanantay, que significa ‘osamentas atacameñas’ en el idioma indígena Kunza, vivió en el Cretácico Superior, de 80 a 66 millones de años atrás.
Hallazgo poco frecuente en Chile
El Museo Nacional de Historia Natural de Chile, que exhibirá los fragmentos, explicó a BBC Mundo la importancia de su hallazgo: "El análisis de los restos encontrados reveló varias características únicas, en especial aquellas de sus vértebras dorsales. Estas singularidades permiten diferenciarlo de otros animales del mismo grupo e identificarlo como una nueva especie".
"El análisis de los restos encontrados reveló varias características únicas"
Localizar estas partes de esqueleto de titanosaurios es habitual en Argentina y Brasil, pero no en Chile: "Es mucho menos frecuente encontrarlos en este lado de la cordillera", contó el Jefe del Área de Paleontología del centro, David Rubilar. Al parecer, hay muy pocos documentos que certifiquen la existencia de dinosaurios de este tipo, "lo que hace del Arackar licanantay un hallazgo muy valioso".