Un análisis de ADN reveló que la mariposa azul de Xerces fue el primer insecto extinguido por el hombre.
Las alas cristalinas de la mariposa azul de Xerces ya no podrán titilar contra la luz del Sol entre las dunas californianas. Todos los ejemplares que existen están empotrados en cajas de cristal, como cadáveres en exhibición para la investigación científica. Este insecto carga con el titulo de ser el primero extinguido por la actividad humana enfocada a la agricultura y la industria ganadera.
El primer insecto que el ser humano desapareció de la faz de la Tierra
La información genética disponible en las alas de los ejemplares dedicados al estudio sugieren que la Glaucopsyche xerces fue el primer insecto extinguido por la actividad humana en Estados Unidos. Identificada por sus característicos tonos azul pastel, era endémica de la península de Sean Francisco. Sin embargo, a principios de la década de los 40, la mariposa había desaparecido.
Han pasado poco más de 80 años desde que el último ejemplar fue avistado en el país. Según la investigación publicada en Biology Letters, su desaparición es consecuencia de la destrucción de su hábitat natural en favor de la agricultura y la ganadería. Al invadir el área, las mariposas entraron en contacto con pesticidas, y no pudieron sobrevivir a las sustancias tóxicas que se impregnaron en las plantas y la tierra.
De la misma manera, cuando se empezaron a plantar ciertos vegetales nativos, una especie de hormiga invasora se extendió en todo el ecosistema. Sólo por medio del análisis de los tejidos de mariposas encapsuladas en el Museo Field de Chicago, un equipo de científicos estadounidenses se dieron cuenta de que ésta era una especie única de mariposa, perdida para siempre a causa de la ganadería.
Candidatas a la resurrección
A partir del cadáver de un espécimen de 93 años, los biólogos pudieron comparar el tejido con el de otras especies de mariposas azules disponibles en Estados Unidos. Corrie Moreau, entomóloga de la Universidad de Cornell, asegura que ésta era una especie aislada de todas las demás de las que se tiene registro.
Por medio de la información genética disponible, los investigadores a cargo de Moreau realizaron un árbol filogenético que describe la evolución de diversas familias de insectos parecidos. Con esto, se dieron cuenta de que la mariposa azul Xerces, hoy un insecto extinguido, era genéticamente distinta. Fue así como justificaron su clasificación como especie independiente.
“Perdimos una pieza del rompecabezas de la biodiversidad que componía el tapiz del área de la Bahía de San Francisco cuando esta especie fue llevada a la extinción”, dice Moreau. Dada su importancia como una especie endémica, según los expertos, esta mariposa es candidata a la resurrección. Por medio de la clonación y otras manipulaciones genéticas, es probable que nuevos ejemplares extiendan sus alas entre las dunas californianas.