Investigadores de la Universidad de Hong Kong lograron aislar la variante ómicron de COVID-19 de muestras clínicas, lo que abre la puerta al desarrollo de una vacuna, informó este martes el Departamento de Microbiología de la institución.
“La variante aislada permitirá el desarrollo y producción de vacunas contra ómicron, que ha sido designada como una ‘variante de preocupación’ por la Organización Mundial de la Salud (OMS)”, señala el comunicado de la casa de estudios.
“El equipo está explorando oportunidades para el desarrollo urgente y la producción de vacunas de virus completos inactivados”, añade el documento.
Asimismo, el equipo de investigación trabaja en la expansión del virus para evaluar su transmisibilidad, capacidad de evasión inmune y patogenicidad en modelos animales.
El equipo de la Universidad de Hong Kong logró aislar la variante el lunes por la noche, cuatro días después de que se confirmaran los dos primeros casos de ómicron en Hong Kong el 25 de noviembre, y cinco días después de que la variante se informara por primera vez a la OMS desde Sudáfrica, el 24 de noviembre.
La OMS designó la variante, inicialmente identificada como B.1.1.529, como una variante preocupante, y la nombró ómicron el 26 de noviembre.
Desde entonces, se han informado casos de esta variante en Australia, Bélgica, Botswana, Gran Bretaña, Dinamarca, Alemania, Hong Kong, Israel, Italia, los Países Bajos, Francia y Canadá.
Ante la aparición de esta nueva variante, las farmacéuticas que han desarrollado biológicos contra el virus SARS-CoV-2 anunciaron que ya están probando o tenían preparada alguna versión de sus vacunas en caso de que surgiera una nueva cepa.
Hasta ahora, Moderna, AstraZeneca y Pfizer-BioNTech han anunciado “armas” actualizadas contra ómicron.