La sonda espacial de la NASA, Juno, captó con el mayor detalle jamás visto de la superficie de Ganímedes, la mayor luna de Júpiter, cubierta de cráteres y detectó brillantes auroras que se extendían entre los polos y el ecuador del cuerpo celeste.
Posible actividad volcánica
Las imágenes tomadas por la cámara telescopio JunoCam de la sonda revelaron una serie de nuevas características en la superficie del satélite natural, que incluyen cráteres de impacto de hasta 100 kilómetros, según detalló un equipo de investigadores.
“Hemos pasado por alto algunos cráteres de impacto realmente grandes que no pudimos ver en los datos de las Voyager”, explicó Goeffrey Collins, geólogo del Wheaton College en Massachusetts.
“Se nos pasó por alto este gran cráter de 100 kilómetros que es realmente obvio en los datos de JunoCam. Y otro cráter un poco menos visible que tiene unos 110 kilómetros de ancho“, añadió.
Asimismo, las nuevas imágenes revelaron varios cráteres más pequeños, de entre 40 y 50 kilómetros de ancho, y múltiples características que los científicos creen que podrían ser resultado de la actividad volcánica de Ganímedes, que habría sido mucho más intensa de lo que se pensaba anteriormente.
Brillantes auroras
Ganímedes no solo es la luna más grande de todo el Sistema Solar, sino que también es la única luna conocida que tiene su propio campo magnético.
Las variaciones de este campo magnético llevaron a los científicos a concluir que ese satélite natural debe tener un enorme océano subterráneo de agua salada, lo que le convierte a Ganímedes en un candidato ideal para la existencia de formas de vida primitivas.