Investigadores nacionales e internacionales descubrieron en los bosques nublados del noroccidente ecuatoriano dos nuevas especies de ranas de cristal (género Hyalinobatrachium), que fueron bautizadas como la rana de cristal de Mashpi y la de Nouns.
Así lo informó el martes el Ministerio del Ambiente, Agua y Tradición Ecológica en un comunicado en el que apuntó que la rana de cristal de Mashpi vive en los bosques de las Reservas Tayra y Mashpi en el noroccidente de la provincia de Pichincha, cuya capital es Quito.
De su lado, la rana de cristal de Nouns habita en los bosques suroccidentales de la provincia andina de Imbabura, en la Reserva Río Manduriacu y Los Cedros.
Ambos bosques están ubicados dentro de la Reserva de la Biósfera del Chocó Andino, uno de los ecosistemas más biodiversos del país.
Ranas de cristal
Se conoce como ranas de cristal al grupo de anfibios de la familia Centrolenidae, que poseen su piel dorsal transparente o completamente translúcida.
Por ello, se puede ver con facilidad y en vivo la disposición de sus órganos, huesos e incluso movimientos fisiológicos como el flujo de la sangre, digestión y respiración, entre otros.
Como la mayoría de los anfibios, las ranas de cristal son indicadores del buen estado de conservación del bosque y limpieza de los cuerpos de agua, reza el escrito.
En Ecuador, se conocen 64 especies de ranas de cristal, incluidas estas dos nuevas especies, de las cuales 19 solo viven en ese país, es decir, son únicas.
Estas ranas son uno de los grupos de anfibios más carismáticos y conocidos a nivel mundial, aunque solo viven en bosques tropicales de Centro y Sudamérica.