Es un hecho que cualquier persona que esté contemplando la Luna desde cualquier punto del globo terrestre estará observando, más o menos, la misma fase lunar.
Si pudieras tener una vista de pájaro de la Luna orbitando la Tierra, verías que nuestro satélite gira una vez sobre su eje cada 27,3 días, que también es la misma cantidad de tiempo que tarda en completar una órbita de nuestro planeta. El resultado es que desde nuestra perspectiva en tierra firme vemos el mismo hemisferio lunar en todo momento y desde cualquier parte de la Tierra. Como mucho, podemos ver un poco más de la mitad de la superficie de la Luna gracias a un efecto de oscilación conocido como libración lunar (el conjunto de movimientos de oscilación que presenta el disco de la Luna con respecto a un observador ubicado en la Tierra).
Existen tres oscilaciones del globo lunar: 1) libración de longitud, debido a que la velocidad orbital de la Luna varía, 2) libración en latitud, a causa de que el ecuador lunar está inclinado con respecto al plano de la órbita lunar unos 6º aproximadamente y, 3) libración diurna, debido a que, por la rotación del planeta, el observador en la Tierra puede ver el disco lunar desde perspectivas diferentes en un mismo día.
Fue el astrónomo italiano Galileo Galilei quien describió primero la libración lunar, calificada inicialmente de “titubeo”.
Así, si tenemos en cuenta todos estos factores, aunque la Luna esté girando, siempre mantiene la misma cara mirando hacia la Tierra, pues el tiempo que tarda en orbitar la Tierra y el tiempo en el que gira sobre su propio eje son los mismos. La Luna orbita la Tierra una vez cada 27,3 días y gira sobre su eje una vez cada 27,3 días. Por eso desde la Tierra, la Luna siempre muestra el mismo lado.
Conocido como "rotación síncrona", es por eso que solo vemos el lado cercano de la Luna desde la Tierra.
¿Y por qué cuando vemos fotos de la Luna de distintas zonas de la Tierra se ven tan distintas?
Las personas situadas al norte y al sur del ecuador ven la fase actual de la Luna desde diferentes ángulos. Si viajaras al otro hemisferio, la Luna estaría en la misma fase pero aparecería al revés en comparación con el otro hemisferio. Esto es, la luna se ve al revés de como la ven quienes se encuentran en el norte o sur del planeta. Alguien de Argentina, no ve la luna de la misma forma que una persona situada en Canadá. Todo tiene que ver con la perspectiva y con la curvatura de nuestro planeta. Es un cambio en la orientación de la luna con respecto al horizonte desde el que miramos.
¿Y por qué se ve la Luna de día?
Una vez que ya sabemos que todos vemos la misma Luna, ¿te has preguntado alguna vez por qué, en ocasiones, puedes ver la Luna durante el día?
La luz del sol y la atmósfera juegan un papel clave acerca de cuándo y cómo vemos el satélite de nuestro planeta. La respuesta es bastante simple: tanto la Luna como las estrellas siempre están en algún lugar del cielo, pero no siempre podemos verlas y es que el Sol es tan brillante durante el día que ahoga la luz de todos los demás astros. De día, la Luna sigue ahí arriba, pero no podemos verla.
En su rotación, es visible para el hombre cuando el sol ilumina el lado que mira hacia nuestro planeta. Precisamente porque el cielo no ha alcanzado su brillo máximo cuando es muy temprano por la mañana, la luna suele seguir siendo visible aunque con tonalidades mucho menos claras.