La científica y divulgadora de la Corporación Aeroespacial de Estados Unidos, Tamitha Skov, dio a conocer que una tormenta solar podría alcanzar la Tierra durante las primeras horas del próximo 19 de julio de 2022, de acuerdo con el modelo que predice su intensidad y efectos.
Debido a este evento, dijo, es probable que algunos aparatos, como los GPS y radios se vean afectados. Las tormentas solares, agregó, son fuertes expulsiones de partículas con carga magnética, que por su intensidad se clasifican de G1 A G5. La que llegará mañana se prevé sea G2 de intensidad moderada.
“El largo filamento en forma de serpiente se desplaza por el Sol en un impresionante ballet. La orientación magnética de esta tormenta solar dirigida a la Tierra va a ser difícil de predecir. Si el campo magnético de esta tormenta se orienta hacia el sur, pueden darse condiciones de nivel G2 (posiblemente G3)”, advirtió.
Las tormentas también pueden provocar auroras. Cuando las partículas expulsadas por el Sol alcanzan la Tierra entran en la atmósfera por regiones cercanas a los polos. Al interactuar con los átomos y las moléculas de la atmósfera, en la región entre unos 95 y 750 kilómetros de altura donde la densidad es suficiente.
En los próximos años, dijo, es probable que se produzcan tormentas solares con mayor frecuencia. A finales de 2019, el Sol comenzó un nuevo ciclo con una actividad solar mínima que irá aumentando en el transcurso de su ciclo natural de aproximadamente 11 años. Se espera que la actividad máxima se produzca entre 2024 y 2026.
Una de las tormenta solares más potentes se registró hace 9 mil 200 años se dio durante un periodo de baja actividad del Sol, algo que los científicos creían imposible. Pero la más fuerte registrada hasta la fecha fue la conocida como Tormenta de Carrington en 1859, por el astrónomo Richard Carrington, quien fue testigo del acontecimiento y la primera persona en comprender la relación entre la actividad solar y las alteraciones geomagnéticas de la Tierra.