Un interesante hallazgo en Marte ha revelado la existencia de vastas llanuras sedimentarias, formadas por el drenaje de antiguos acuíferos dentro de las misteriosas formaciones de colapso marciano conocidas como "terrenos caóticos".
Esta revelación proviene de una investigación liderada por Alexis Rodríguez del Instituto de Ciencias Planetarias (PSI), quien describe estas llanuras sedimentarias como los restos de un antiguo lago de lodo que se formó hace casi 4 mil millones de años, en una época en la que Marte podría haber sido habitable.
Los científicos creen que estos sedimentos podrían ser portadores de evidencia de vida marciana de ese período o incluso de períodos posteriores. Según Rodríguez, "es importante recordar que el subsuelo de Marte podría haber sido habitable durante toda la historia de la vida en la Tierra".
La investigación también ha revelado la presencia de enormes canales de inundación que se extienden por miles de kilómetros en las tierras bajas del norte de Marte. La erosión causada por estos canales, junto con los sedimentos liberados de los acuíferos subterráneos, cubre extensas áreas de las tierras bajas del planeta rojo, planteando un desafío formidable para la comprensión de la naturaleza de los acuíferos marcianos.
La toma de muestras en las llanuras del norte podría resultar peligrosa debido a la dificultad de distinguir entre los materiales procedentes de los acuíferos y los erosionados durante la formación de los canales. Sin embargo, las llanuras dentro de Hydraotes Chaos, donde se realizó este descubrimiento, ofrecen una visión única de los materiales de los antiguos acuíferos, lo que permite una exploración más precisa.
El hallazgo abre una ventana al pasado geológico del planeta rojo. Foto Europa Press
Según Rodríguez, este hallazgo simplifica la investigación de los acuíferos marcianos y reduce el riesgo de contaminación con sedimentos terrestres, proporcionando una nueva ventana al pasado geológico de Marte.
El estudio revela que el acuífero que alimentó el antiguo lago de lodo probablemente se formó debido a la segregación de fases dentro de las lutitas, creando enormes cámaras llenas de agua de varios kilómetros de ancho y cientos de metros de profundidad. Este proceso podría haber sido desencadenado por actividad ígnea intrusiva, según Bryan Travis, coautor del estudio.
Además, el terreno caótico muestra un patrón de hundimiento segmentado que sugiere una red interconectada de cámaras subterráneas gigantes llenas de agua, algunas de las cuales son mucho más grandes que cualquier contraparte en la Tierra.
Rodríguez señala que las biomoléculas podrían haberse dispersado inicialmente en estas grandes cavidades subterráneas llenas de agua. A medida que el agua se liberaba y estancaba en la superficie, se acumulaban sedimentos y posiblemente altas concentraciones de biomoléculas, lo que hace de estos sedimentos una valiosa fuente de información sobre la historia geológica de Marte.
La NASA está considerando estas llanuras como un posible lugar de destino para una futura misión en busca de evidencia de biomarcadores, específicamente lípidos, que podrían haber perdurado durante miles de millones de años en Marte, según Mary Beth Wilhelm, coautora del estudio y miembro del Centro de Investigación Ames de la NASA.
Este descubrimiento abre una ventana de esperanza para la búsqueda de vida antigua en el planeta rojo y para comprender mejor su historia geológica.