La NASA tiene la ambiciosa meta de poner humanos en Marte para 2039, según la previsión de la agencia espacial estadounidense.
Este plan revolucionario implica el uso estratégico de la Luna como una "plataforma de pruebas" para desarrollar tecnologías e investigaciones esenciales que permitirán la supervivencia humana en el planeta rojo.
El ingeniero de la NASA, Carlos García-Galán, explica que antes de conquistar Marte, es imperativo regresar a la Luna, aprovechando la tecnología avanzada y la logística desarrollada en más de 50 años desde la última misión Apolo.
El programa Artemis de la NASA, que consta de varias fases, tiene como objetivo explorar la Luna, con la primera nave no tripulada lanzada en noviembre de 2022 y astronautas programados para llegar en 2026.
García-Galán destaca que la próxima década se centrará en preparativos lunares, mientras que la siguiente se dedicará a la infraestructura lunar y la estación espacial Gateway.
Se espera que a finales de la década de 2030, comiencen los trabajos en sistemas para Marte, con la posibilidad de realizar el histórico viaje en la década siguiente.
Para acelerar este proceso, se planea una colaboración entre agencias gubernamentales y empresas privadas, aprovechando la innovación de compañías como SpaceX y Blue Origin.
Sin embargo, García-Galán advierte sobre los desafíos logísticos del viaje a Marte, que puede durar de seis a nueve meses, con comunicaciones que experimentan retrasos significativos.
Imagen tomada de Lexus España
La Luna se convertirá en un campo de pruebas para establecer campamentos humanos y experimentar con tecnologías necesarias para la vida en Marte, según Andrés Martínez, ejecutivo del programa de operaciones independientes de la Tierra en la NASA.
Se enfocarán en desarrollar sistemas autónomos que resuelvan problemas antes de que ocurran, asegurando la seguridad de las futuras misiones marcianas.
Pisar Marte en 2039 es un objetivo desafiante que depende del trabajo colaborativo con la industria y la coordinación internacional. La investigación abarca desde la tecnología espacial hasta la agricultura y la biología para garantizar la supervivencia en el espacio profundo.
Con el despliegue de nanosatélites, se recopilarán datos clave en la órbita lunar para futuras misiones. La NASA busca crear un ecosistema que permita a los astronautas vivir en el espacio, aprendiendo de experimentos biológicos con levadura en el satélite BioSentinel.
Aunque la conquista del espacio ha sido un tema recurrente en el cine, la NASA se centra en hacer realidad el sueño interplanetario.
Con una mezcla de tecnología avanzada y colaboración global, la visión de la humanidad como exploradores interplanetarios podría materializarse en las próximas décadas.