Este 4 de enero, la Tierra se acercará al Sol más que en cualquier otro momento del año, al llegar al perihelio, el punto de su órbita anual más cercano al astro rey.
A las 07:28 horas en México, la distancia entre ambos será de aproximadamente 147.1 millones de kilómetros.
Este acercamiento acelera la velocidad orbital del planeta a un ritmo máximo, alcanzando los 110,700 kilómetros por hora, 3,420 kilómetros más rápido que la velocidad promedio.
La Tierra sigue una órbita elíptica de 930 millones de kilómetros alrededor del Sol, recorriéndola en 365 días y casi 6 horas, lo que explica la existencia de los años bisiestos.
Según la segunda ley de Kepler, la velocidad de traslación de la Tierra varía: cuando está más cerca del Sol, como en el perihelio, la velocidad aumenta, mientras que cuando se aleja, como en el afelio, disminuye.
En este último caso, la velocidad se reduce a 103,536 kilómetros por hora, con una diferencia de más de 7,000 kilómetros por hora respecto al perihelio.
El afelio de 2025 ocurrirá el 3 de julio, cuando la Tierra se encuentre a unos 152.1 millones de kilómetros del Sol, unos 5 millones de kilómetros más lejos que en el perihelio.
Este fenómeno demuestra cómo la distancia de un planeta al Sol influye directamente en su velocidad orbital, un principio observado por Kepler al notar que los planetas se mueven más rápido cuando están cerca del Sol y más lentamente cuando se alejan.