Ser cineasta en México es una profesión a contracorriente. Los saben los egresados de las escuelas de cine que filman una ópera prima y también los directores consagrados, que deben reinventarse con cada película que hacen como si fuera la primera. Muchos lo han aprendido por la mala. Ahora ha tocado el turno a Amat Escalante, un cineasta que ha sido premiado en diversos festivales europeos, como Cannes. Las disputas entre las dos grandes exhibidoras en México, Cinépolis y Cinemex, han salpicado el estreno de La región salvaje, ganadora del León de plata en el Festival de Venecia de 2016.
Este martes, Escalante recibió un mensaje preocupante. Un correo electrónico de su distribuidor encendió las alarmas. La comunicación afirmaba que Cinemex, la segunda cadena de exhibición en el país, había decidido no proyectar en sus salas su cuarta película. La empresa había ofrecido, hace un mes, 40 salas. Después las había rebajado a 15. Finalmente, pasó a cero. Para justificar su decisión, Cinemex explicó que no había podido encontrar ningún espacio ante los numerosos títulos estadounidenses que optan a un Oscar y que llegarán a las salas el dos de febrero.
“Nunca me había topado que a dos días del estreno salgan con que no se programa”, contó el cineasta a EL PAÍS. Escalante consideró la decisión “triste, ilógica y algo indignante”. La noticia lo sorprendió mientras realizaba un tour de prensa para promocionar la película, una violenta fábula en la que un espantoso monstruo da un placer sexual inimaginable a los personajes que viven en la conservadora sociedad de Guanajuato, un Estado al centro de México.
Pero el correo que llegó al buzón de Escalante no era de una parte desinteresada. El texto le fue enviado por gente de Cinépolis, la competencia de Cinemex y quien opera el 50% de las 6.432 salas de cine que hay en México. Desde hace dos años, esta empresa líder del mercado decidió probar suerte como distribuidora. El esfuerzo se hizo para dar más visibilidad a algunas películas mexicanas, pero también originó un claro conflicto de interés. El líder del sector distribuye las películas a su competencia.
A dos días de su estreno, @Cinemex eliminó de su programación LA REGION SALVAJE de Amat Escalante, ganador al mejor director en el Festival de Venecia 2016. La excusa, no tener espacio por la cantidad de títulos. Esto es ofensivo e indignante. Espero @Cinemex reconsidere.
— Alfonso Cuaron (@alfonsocuaron) 31 de enero de 2018
El mensaje incendió el buzón de Escalante.
La negativa de Cinemex saltó pronto a las redes, donde movilizó a varios cineastas ante lo que parecía una decisión arbitraria. Alfonso Cuarón, el oscarizado director de Gravity, dijo en Twitter que el argumento utilizado por Cinemex para desplazar la película es "ofensivo e indignante". "Espero que Cinemex reconsidere", escribió el director de Y tu mamá también, otra película mexicana que triunfó en Venecia años antes que la de Escalante.
Sin embargo, Cinemex, que tiene 2.705 salas en México (un 30% de la cuota del mercado), ha desmentido la información. Una persona de la empresa, que ha pedido a este diario no revelar su nombre, dijo que todo esto ha sido “una telenovela creada de la nada” por Cinépolis. “Me parece mal lo que han hecho”, agregó. Según su versión, Cinemex nunca eliminó de su programación La región salvaje y confirmó a EL PAÍS que la cuarta cinta de Escalante podrá ser vista en 28 salas a partir de este viernes.
De esta forma, La región salvaje llega a su país de origen sin evitar la polémica. No es la trama, de alto voltaje sexual y cargada de violencia, la que causa el debate. La discusión la abren los eternos problemas del cine mexicano: la distribución. Todo esto un año y cuatro meses después de su estreno en Europa.
La película no será campeona de la taquilla. Es una obra de autor con un estilo que exige al gran público, acostumbrado a las fórmulas cinematográficas. Como la mayoría de los 162 largometrajes mexicanos producidos en 2016, la película está financiada con dinero del Estado. El Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine) es el gran inversionista del cine mexicano. En 2016 inyectó 45 millones de dólares a la industria, el 58% del dinero aportado al cine aquel año. Las disputas entre Cinépolis y Cinemex marcan un difícil primer fin de semana y auguran una incierta taquilla a Escalante y sus otros 22 productores.
Mientras el camino para La región salvaje es cuesta arriba en México, la cinta sigue cosechando público y elogios de parte de la crítica en otras partes del mundo. “Se ha vendido en Japón y en Alemania, donde casi no se ve cine mexicano. Después de varias semanas, sigue en cines en España con buena aceptación”, agrega Escalante.
Los especialistas de la industria creen que este teléfono descompuesto entre Cinemex y Cinépolis está vinculada a disputas comerciales. Los cineastas han quedado en medio del choque de los gigantes de la exhibición. Todo este embrollo demuestra que la verdadera región salvaje en México son los territorios del duopolio cinematográfico.