Explicó que 25 por ciento del Universo está formado de materia oscura, cuya presencia se ha comprobado desde la teoría, pero no se ha podido ver experimentalmente porque no emite radiación.
Otro 70 por ciento está formado por energía oscura, algo aún más extraño, que no se sabe a detalle qué es, dijo en conferencia en el instituto de Astronomía de esta casa de estudios.
crédito : UNAM
Desde la antigüedad, el ser humano de distintas civilizaciones ha mirado al cielo para responder a las preguntas fundamentales de cómo se originó el Universo, de qué está formado y cómo ha evolucionado hasta nuestros días.
Observatorios antiguos y modernos, telescopios, radioscopios, satélites y sondas espaciales han ayudado a los astrónomos a observar para avanzar con sus miradas tecnológicas el conocimiento de esta área medular de la ciencia.
“Apenas se ha descubierto el cinco por ciento de la materia, la que es visible porque irradia luz y constituye a galaxias, planetas, estrellas y todos los seres vivos”, dijo Carlos Frenk Mora, egresado de la Facultad de Ciencias de la UNAM, y fundador y director del Instituto de Cosmología Computacional, dependiente del Departamento de Física de la Universidad de Durham, Reino Unido.
El 25 por ciento del Universo está formado de materia oscura, cuya presencia se ha comprobado desde la teoría, pero no se ha podido ver experimentalmente, pues no emite ninguna radiación. “Y el 70 por ciento está formado por algo aún más extraño, que no sabemos a detalle qué es y por eso le llamamos energía oscura”, indicó el astrónomo mexicano.
En el auditorio Paris Pishmish del Instituto de Astronomía, en ocasión de su ingreso como miembro correspondiente a la Academia Mexicana de Ciencias (AMC), Frenk Mora ofreció la conferencia Todo de la nada: cómo se formó nuestro Universo, en la que dijo que “todo es el Universo, y nada se refiere al vacío”.
La energía oscura es invisible a nuestros ojos, produce una fuerza repulsiva y participa en la expansión del Universo. Por su parte, la materia oscura se conoce con evidencia científica desde la década de 1970, y hoy se sabe que produce halos que rodean a las galaxias. “La materia oscura ha esculpido al Universo”, expuso.
Simulaciones cosmológicas
Frenk Mora indaga el misterio de la materia oscura. Para lograrlo ha creado una herramienta potente, rigurosamente científica y estética de la evolución del Universo: una gigantesca simulación cosmológica.
Nutrida con datos científicos que aportan resultados visuales a partir de un enjambre matemático, el astrónomo mexicano creó, junto con su colega Simon White, director del Instituto Max Planck de Astrofísica de Alemania, el modelo de Materia Oscura Fría con Constante Cosmológica, con el cual recrean en una supercomputadora la formación y evolución de las estructuras cósmicas.
En su simulación, introdujeron las condiciones iniciales del cosmos y su hipótesis sobre su contenido. Incluyeron ecuaciones sobre la relatividad general, mecánica, hidrodinámica radiativa y física atómica, entre otras. Después, corrieron los programas de cómputo y obtuvieron la formación gradual de hilos que, poco a poco, se van engrosando hasta formar ovillos que concluyen en galaxias.
Formada la gran simulación, la impresión es la de una enorme telaraña cósmica, constituida por hilos y filamentos que unen hasta a mil millones de galaxias. Éstas llegan a esa formación por la acción de la gravedad, luego del calmo y en apariencia “vacío” estado inicial.
Por este trabajo, realizado dentro del proyecto The Millennium Simulation, Frenk Mora es uno de los líderes mundiales en cosmología.
Trayectoria
Estudió física en la Facultad de Ciencias y completó estudios de maestría y doctorado en la Universidad de Cambridge, en Reino Unido.
En 2014 recibió la Medalla de Oro de la Real Sociedad Astronómica del Reino Unido, un honor que han merecido mentes brillantes como las de Albert Einstein, Edwin Hubble y Stephen Hawking.
“Soy universitario, la UNAM es mi primera alma máter”, dijo orgulloso. “Aquí aprendí a ser crítico, algo que caracteriza a la ciencia”.
A distancia, en Reino Unido apoya a los estudiantes mexicanos que viajan a aquel país y mantiene un contacto cercano con científicos mexicanos de su disciplina. Desde hoy, por solicitud de destacados integrantes del gremio astronómico del país, es miembro correspondiente de la Academia Mexicana de Ciencias.