En México, el uso del teléfono se ha ido incrementando año con año (un estudio publicado por Ericsson, considera que para el año 2020, más de 6,100 millones de personas utilizarán teléfonos), sólo imagínate cuantas personas consultan su teléfono en el baño.
Bacterias, bacterias y más bacterias
Bueno, Charles Gerba, profesor de microbiología en la Universidad de Arizona considera explica que en el baño habitan un montón de gérmenos patógenos y bacterias entéricas (que pertenecen al tracto intestinal) que provienen directamente de la materia fecal. De acuerdo con el experto, las superficies más contaminadas son la perilla de la puerta, el inodoro, las tarjeas y el piso.
Y de acuerdo con Brenda Ramírez Vega, coordinadora auxiliar de Salud Pública del Seguro Social en Chihuahua, destacó que estas bacterias causan enfermedades infecciosas que se contagian muy fácilmente y algunas muestran resistencia a los antibióticos.
Si eso no te convence para dejar de llevar tu teléfono al baño, tal vez este doloroso motivo sí lo haga.
La lectura sanitaria produce hemorroides
Según el especialista en coloproctología, Ángel Rosado Martínez:
“La gente que tiene la costumbre de la lectura sanitaria va más allá de los 10 minutos, que es lo que está sustentado que en promedio comienza a ser perjudicial para las hemorroides. La costumbre de lectura en el baño tiene mucho tiempo, antes era de revistas, periódicos libros, etcétera”.
El doctor, explico en entrevista para Notimex, que cada vez son más las víctimas de hemorroides que se relacionan con la lectura sanitaria a partir del uso de teléfonos móviles.
Por su parte, el creador y presentador del programa gastrocéntrico Ask Dr. Nandi’s, ganador del premio Emmy , el Dr. Partha Nandi dice:
“Cuando se queda en el inodoro durante más de 20, 30 o 40 minutos, está poniendo “presión innecesaria en el recto, [que] puede causar hemorroides, y definitivamente puede empeorar las hemorroides preexistentes”.
Así que lo recomendable es ir, satisfacer tus necesidades, rápido y volver a tu vida fuera del inodoro.
La obsesión por el teléfono
Al estar pendiente de tu teléfono todo el tiempo, te olvidas de darle a tu cerebro un descanso y, para Peter Bregman –autor de best-seller relacionados con la organización y el éxito: “si nunca dejas que tu cerebro se relaje y se distraiga, nunca resolverás los problemas creativos más profundos y pegajosos que, en última instancia, son más importantes que responder a un correo electrónico en cinco minutos”.
Finalmente, en un descuido tu teléfono puede caer en la taza del baño y bueno, no queremos que suceda eso, porque ya sabes lo que se encuentra ahí.
Fuente: Código Espagueti