Los microprocesadores continuarán escaseando en todo el mundo y no habrá signo de mejora sino hasta finales de 2023. Eso significa que no esperes que los precios de los productos tecnológicos bajen pronto ya que seguirás sin poder comprar un Xbox One Series X y PS5.
Al menos así lo ha advertido Toshiba, la marca reconocida por manufacturar aparatos electrónicos. La compañía ha aceptado a Bloomberg que la demanda de computadoras y dispositivos “inteligentes” no deja de aumentar y en cambio, la cadena que suministra chips en el mundo sigue teniendo problemas logísticos.
“El suministro de chips seguirá siendo muy escaso al menos hasta septiembre del próximo año.” aseguraron desde Toshiba.
Los teléfonos, computadoras y tablets han quedado desplazados en prioridad para los cargamentos de microprocesadores. Los nuevos favoritos de la industria y quienes están hasta arriba en la lista de entregas son los vehículos. El auge de los autos inteligentes (impulsada por la exigencia de la Unión Europea por contar con solo vehículo eléctricos) ha supuesto un aumento en la demanda de chips que coincidió con la reducción de producción de las fabricas asiáticas tras el COVID-19.
De hecho Toshiba confesó que está lidiando con un fenómeno nuevo propio de la pandemia de coronavirus. La marca está haciendo acuerdos y compromisos con sus clientes a largo plazo para asegurar la entrega de microprocesadores.
“Por lo general, recibimos pedidos con semanas y meses de anticipación, pero actualmente enfrentamos crecientes consultas durante medio año en el futuro y más allá…Los contratos a largo plazo que se acumulan de esta manera es nuevo para nosotros”.
Actualmente en Asia se está priorizando la operación lenta pero segura de las fabricas para impedir un cierre definitivo que provoque un paro vertiginoso en la cadena de suministro mundial. Así que mejor conserva la paciencia porque esto va para largo.
Con información de Código Espagueti.