Los seguros de automóviles son siempre tema de polémica en medio de las personas con un permiso de conducción que muchas veces se quejan de los elevados precios que cobran las aseguradoras en el mundo. Además de los gastos normales de un vehículo (como gasolina y daños que puedan surgir), el seguro es uno de esos documentos que consume una parte importante del presupuesto destinado para los gastos del mismo.
Actualmente, el costo de las pólizas en la mayoría de los países suele decidirse en cuestión del modelo del automóvil, la edad de su dueño y la zona geográfica en la que vive o se desenvuelve socialmente. Esto hace que las tarifas se mantengan de forma uniforme, discriminadas y agrupadas en comunidades que comparten los resultados en varios de estos ítems.
No obstante, para varias empresas en todo el planeta este tipo de clasificación se puede considerar como obsoleta, por lo que desde hace varios años se ha venido trabajando en la implementación de una nueva estrategia con la que se pueda calcular el costo de un seguro automotriz de forma individual para cada persona.
Ejemplo de esto es el proyecto que tiene Tesla, empresa liderada por Elon Musk, que en su llegada al gremio asegurador en el estado de Texas, Estados Unidos, le ha apostado por una forma de cobro cuya base es la forma en la que conduce el contratante del seguro.
La nueva forma de cobro que sería instaurada en los próximos meses en los vehículos fabricados por esta marca, busca que los sensores dentro de cada carro sean los que determinen el precio que se le impondrá a un conductor cada mes, según sus habilidades en la conducción.
“A diferencia de otros productos de seguros telemáticos o basados en el uso, Tesla no requiere la instalación de un dispositivo adicional en su vehículo. Tesla utiliza características específicas dentro del vehículo para evaluar su prima en función de su conducción real. Realizará pagos mensuales en función de su comportamiento de conducción en lugar de factores tradicionales como el crédito, la edad, el sexo, el historial de reclamaciones y los registros de conducción utilizados por otros proveedores de seguros”, indicó la empresa por medio de un comunicado.
Así, Tesla ajustará las tarifas del seguro para sus usuarios de acuerdo a cinco puntos importantes:
- Advertencias de colisión frontal por cada 1.000 millas (1.609 kilómetros).
- Frenado fuerte.
- Giro agresivo.
- Distancia de seguimiento insegura.
- Desacoplamiento forzado del piloto automático.
Por otra parte, la compañía explicó que al momento de afiliarse todos los conductores tendrán un puntaje de 90 unidades lo que traducido en dinero serían 121 dólares el primer mes. Ya el segundo mes es cuando Tesla empezará a cambiar la tarifa la cual puede ser más alta o más baja respecto al cobro anterior según los registros de los sensores sobre la forma cómo condujo la persona.
De esta forma, si alguien tiene un puntaje de 98, en la factura del próximo mes le cobrarían solo 83 dólares, mientras que con un ranking de 88 puntos el costo del servicio aumentaría a 130 dólares.
En resumen, Tesla asegura que de acuerdo con su forma de conducir una persona con un promedio relativamente bueno podría ahorrar entre un 20 % y un 40 % en su seguro comparado con otras aseguradoras; mientras que los usuarios con los puntajes más altos podrían obtener un ahorro de hasta un 60 %.
“Actualmente está disponible para todos los propietarios de Model S, Model 3, Model X y Model Y en Texas”, finalizó la empresa, recordando que por el momento este proyecto es solo una prueba, aunque se espera que en los próximos meses las autoridades regulatorias lo aprueben para así poder formalizarlo al sur de Estados Unidos.