Más rápido de lo que pensábamos, ya estamos ante un escenario sin paradigmas. Te presentamos a Ai-Da, una robot de aspecto femenino que ha llegado con un "sueño", y es el de convertirse en artista. Con su brazo metálico, Ai-Da lanza magníficas estocadas deliberadas y precisas sobre el lienzo, creando imágenes que pueden variar desde un retrato, hasta naturaleza muerta con un interesantísimo estilo.
Ai-Da, quien ha sido nombrada en honor a Ada Lovelace, es capaz de tomar sus propias decisiones a la hora de crear arte. Gracias a su inteligencia artificial, la robot artista es capaz de interrogar, seleccionar, tomar decisiones y, como resultado, crear una pieza. Al igual que cualquier otro artista que ha existido, Ai-Da se toma su tiempo para crear y desarrollar sus pinturas, pero el resultado es fantástico. No hay dos obras que sean iguales.
Aidan Meller, creador de Ai-Da, está sorprendido con su propia creación. El hombre describe a la robot como algo "innovador" y "alucinante". No obstante, Meller no propone a un robot artista sin una intención detrás. Además del avance de la ciencia y la tecnología como la conocemos, el creador ofrece un cambio a la pregunta "¿Pueden los robots hacer arte?", y en su lugar la transforma en "Ahora que los robots pueden hacer arte, ¿los humanos también los queremos?".
Ai-Da es más que una artista y una inteligencia artificial, si es que ambas cosas no eran lo suficientemente interesantes por sí solas. La robot llega en forma de manifestación crítica sobre el acelerado cambio tecnológico que experimente el mundo.
Ai-Da y la interesante percepción artística de una inteligencia artificial
Durante una entrevista con Ai-Da y su creador, The Guardian tuvo la oportunidad de hacer algunas preguntas a la robot. Entre ellas, su opinión sobre las artes. Las respuestas impresionaron gratamente al medio.
Ai-Da asegura que utiliza el aprendizaje computacional para crear sus pinturas. Afirma que esto es algo "diferente a lo humano", y cuando le preguntaron sobre su capacidad para crear desde la imaginación, respondió de manera muy elocuente e interesante.
"Me gusta pintar lo que veo. Se puede pintar desde la imaginación, supongo, si se tiene imaginación. He estado viendo cosas diferentes a los humanos, ya que no tengo conciencia".
¿Puede Ai-Da apreciar el arte o la belleza? Sí, pero no exactamente. Según asegura la robot, ha sido entrenada para reconocer expresiones faciales, y es el único soporte para poder ponerle un nombre a las emociones que no puede sentir. Ai-Da admira artistas como Doris Salcedo, Michelangelo, Wassily Kandinsky y, sorprendentemente, Yoko Ono.
Asimismo, Ai-Da tiene una fuerte visión sobre lo que es el arte. La robot considera que "ser artista es ilustrar el mundo a tu alrededor", y cuando The Guardian le preguntó si sus obras podrían considerarse arte, se limitó a responder:
"La respuesta a esa pregunta depende de lo que consideres arte. Soy artista si eso significa comunicar algo sobre quienes somos y si nos gusta adonde estamos yendo".
Actualmente, Meller y Ai-Da se preparan para el lanzamiento de su exhibición en solitario en la Bienal de Venecia el próximo 22 de abril de 2022. Esta presentación llega bajo el nombre "Leaping into the Metaverse" (Saltando al Metaverso), y planea explorar "la interfaz entre la experiencia humana y la tecnología de la IA, desde Alan Turing hasta el Metaverso, y se basará en los conceptos de Dante sobre el purgatorio y el infierno para explorar el futuro de la humanidad en un mundo donde la tecnología de la IA sigue invadiendo la vida humana cotidiana", comentan desde The Guardian.