La adopción de perros robot con inteligencia artificial ha comenzado, y parece ser el comienzo de una revolución en el ámbito de la atención médica. Sony, la multinacional conocida por su innovación en tecnología, ha dado un giro a la utilidad de sus perros robot de entretenimiento. Ahora, la propuesta es que estas “mascotas” electrónicas sean destinadas a instituciones médicas para promover el bienestar y el buen humor de los pacientes en recuperación.

¿Por qué Instituciones Médicas?

El “Programa de padres adoptivos de Aibo” nace con el objetivo de ofrecer una segunda vida a las mascotas robot que, en lugar de convertirse en desecho electrónico, pueden servir en un espacio de recuperación y sanación. Las instituciones médicas se convierten en el escenario perfecto ya que, a través de un estudio, Sony identificó que la interacción con Aibo tiene un impacto positivo en la salud y el ánimo de pacientes, familiares y personal médico.

Aibo: Más que un Juguete Electrónico

Si te preguntas cómo funciona Aibo, es similar a otros dispositivos inteligentes de la casa. Con la aplicación “Mi Aibo”, los usuarios pueden interactuar, configurar y hasta “alimentar” a su mascota robot. Gracias a su sistema integrado de inteligencia artificial, Aibo es capaz de aprender de sus dueños y desarrollar una “personalidad única”. Su comportamiento puede imitar a una mascota real: tomar siestas, jugar con pelotas o esperar a sus dueños en la puerta.

Incluso si Aibo sufre un daño irreparable, no todo está perdido. Sony ofrece la posibilidad de guardar los "recuerdos" de Aibo en la nube. De esta manera, si se decide adquirir un nuevo Aibo, este puede incorporar la información de su predecesor.

Costo y Planes de Suscripción

Aibo no es precisamente económico. Está disponible como “robot de entretenimiento” por $1.345. Además, hay un plan de suscripción básico de tres años con un costo de $611 o $20 mensuales. También existe un plan de soporte que varía entre $360 y $135.

En conclusión, Sony ha encontrado una manera innovadora de reutilizar y darle un propósito renovado a sus perros robot. Lo que antes era solo un juguete electrónico, ahora puede ser un apoyo emocional en el proceso de recuperación de muchos pacientes. En un mundo donde la tecnología avanza a pasos agigantados, es reconfortante ver cómo se busca un equilibrio entre lo digital y la empatía humana.