En una movida que recuerda a los recientes cambios en el iPhone, Apple ha renovado su línea de computadoras Mac durante 2023, introduciendo una novedad significativa: el puerto USB-C. Este año, la compañía ha presentado una variedad de dispositivos, incluyendo nuevos modelos de iPhone, iPad, Apple Watch, Mac y MacBook. Aunque se enfatizó la incorporación de puertos USB-C en estos eventos, los usuarios notaron rápidamente que los accesorios de estos productos aún mantenían entradas USB Lightning.
Apple no destacó este cambio en sus eventos, pero circulan rumores sobre una próxima versión de accesorios como el Magic Mouse o Magic Keyboard, que reemplazarían el conector Lightning por USB-C. Según “Instant Digital”, experto en productos Apple, estas versiones actualizadas podrían llegar a las tiendas entre marzo y mayo de 2024, afectando a dispositivos como Magic Mouse, Magic Keyboard y Magic Trackpad.
Esta transición a USB-C, aunque no confirmada oficialmente por Apple, se alinea con las regulaciones de la Unión Europea, que busca establecer un estándar de carga único para reducir la basura electrónica.
Beneficios del Puerto USB-C
La exigencia de la Unión Europea hacia Apple para adoptar el USB-C va más allá de la sostenibilidad. Uno de los principales beneficios es la versatilidad, permitiendo a los usuarios de iPhone cargar sus dispositivos con cargadores Android, rompiendo la dependencia de un único tipo de cable.
Además, el USB-C ofrece una velocidad de carga superior a la del puerto Lightning, alcanzando capacidades de hasta 200 watts. Esta mayor velocidad es un cambio notable para los usuarios de dispositivos Apple.
El Costoso Cable USB-C de Apple
En línea con su gama de accesorios premium, Apple ofrece un cable Thunderbolt 4 con conexión USB-C por 159 dólares. A pesar de su alto precio, comparado con alternativas más económicas de tres a cinco dólares, este cable destaca por su avanzada tecnología y diseño.
Adam Savage, conocido por "Cazadores de Mitos", junto a expertos, analizó este cable, descubriendo que alberga una complejidad técnica y de diseño sorprendente. Contiene un "pequeño computador" en su conector, equipado con una placa base en miniatura, múltiples componentes y dos fuentes de energía independientes.
Los análisis revelan que el cable puede transferir datos a velocidades de hasta 40 gigabytes por segundo, gracias a un chip en el centro del conector que gestiona la información. Además, su diseño incluye protecciones contra fluctuaciones eléctricas y cumple con estrictas certificaciones de fiabilidad, justificando su elevado costo.
Esta renovación de los dispositivos de Apple, especialmente en lo que respecta a los puertos USB-C, indica un paso importante hacia la estandarización y la eficiencia en la transferencia de datos y carga, aunque con un coste elevado para ciertos accesorios.
