Apple ha dado un paso adelante en la carga inalámbrica con el lanzamiento del iPhone 16 y iPhone 16 Pro, incorporando el estándar Qi2, que permite una carga más rápida y accesorios magnéticos, características que aún no han sido adoptadas por los fabricantes de Android como Samsung y Google. Ambos modelos de iPhone 16 permiten carga inalámbrica a una velocidad de 25W, superando los 15W que ofrece el resto de dispositivos equipados con Qi2 y dejando atrás los 5W de la carga Qi tradicional.
Mientras los usuarios de Android continúan esperando que las marcas implementen esta tecnología, el ecosistema de Apple ya se beneficia de una carga más rápida y una mejor integración con accesorios magnéticos. Aunque Samsung y Google han mejorado la velocidad de carga por cable en sus dispositivos, como el Galaxy S24 Ultra, los usuarios de Android aún sienten la falta de una adopción más rápida de Qi2 y el uso nativo de accesorios magnéticos compatibles con MagSafe.