En el mundo digital actual, convivimos con una gran cantidad de cables, desde los que alimentan nuestros dispositivos hasta los que conectan nuestros equipos. Tenerlos enredados, a la vista o sin control no solo genera desorden visual, también puede ser un riesgo. Por eso, aquí te compartimos cinco trucos efectivos para organizar tus cables, sin complicaciones y con soluciones accesibles.
1. Solo deja conectados los cables necesarios
Haz una lista de los cables que realmente usas a diario. Clasifícalos en tres grupos: los que deben permanecer conectados, los que usas ocasionalmente y los que puedes guardar. Al reducir la cantidad visible, ganarás orden y evitarás enredos. Guarda los que no necesitas en cajas o bolsas etiquetadas para tenerlos siempre localizables.
2. Usa tubos cubre cables
Agrupa todos los cables que van, por ejemplo, del televisor al enchufe en un solo tubo. Esto no solo mejora la estética, también evita enredos y facilita mover o limpiar los dispositivos. Puedes encontrar tubos de metro y medio por menos de 10 euros (aprox. $185 MXN), y con uno solo puedes organizar el área del televisor o la PC.
3. Etiquetas: pequeñas, pero poderosas
Identificar cada cable con una etiqueta te ahorrará mucho tiempo. Puedes usar etiquetas adhesivas hechas por ti o comprar juegos ya listos: 300 etiquetas de colores cuestan cerca de 10 euros (aprox. $185 MXN). También puedes aplicar códigos de colores si prefieres un sistema visual más rápido.
4. Cajas organizadoras y clips para mantenerlo todo en su lugar
Si tienes regletas o extensiones con varios cables conectados, usa una caja especial para cables. Estas son seguras, ventiladas y hechas con materiales resistentes. Además, puedes fijar clips adhesivos a la pared por menos de 10 euros (aprox. $185 MXN) para mantener los cables rectos y estéticamente alineados.
5. Tu escritorio también merece orden
Coloca sujetacables adhesivos sobre tu escritorio. Puedes conseguir varios por menos de 7 euros (aprox. $130 MXN) y ahí mantener tus cables USB, audífonos y accesorios siempre en su lugar. Si puedes, haz un orificio para pasar cables por la parte trasera de la mesa, y aprovecha ganchos para colgar tus audífonos cuando no los uses.
Organizar tus cables no solo es una cuestión estética, sino también de funcionalidad y seguridad. Con estos trucos simples y económicos, podrás mantener tus espacios ordenados, tus dispositivos al alcance y tu entorno mucho más cómodo y limpio.