La música ha sido desde hace mucho un detonante de la actividad turística, los festivales culturales, los encuentros de música de diversos géneros es sin duda un vehículo de promoción de los pueblos y las comunidades de México.
Los visitantes, sobre todo, quieren conocer la música popular, auténtica, genuina, vale decir: la música del pueblo, la misma que las grandes masas crearon y disfrutan eternamente.
En Morelos un caso representativo es el Encuentro Nacional de Bandas de Viento que desde hace 20 años tiene como sede permanente el Pueblo Mágico de Tlayacapan evento que se realiza el último fin de semana de octubre y se concatena con la Feria del Barro los días 1 y 2 de noviembre.
Tlayacapan, comunidad de orígenes prehispánicos, está situada en los montes de la Sierra del Tepozteco, al norte del estado de Morelos. Conserva fuertemente sus raíces culturales que se manifiestan en su vida cotidiana, sus rituales de adoración, la alfarería artesanal, sus mayordomías, sus danzas, su música tradicional y en el brinco del Chinelo, símbolo de Morelos.
El turista visita un país por diversos intereses y atractivos, pero es indudable que la música es la ventana, el espejo y reflejo de lo mejor de una nación. Aunque el visitante no le interese la música del país que visite como una de sus preferencias, siempre ve la música de ese país que visita en su sitio, cara a cara con ella, con sus raíces prístinas.
El Encuentro Nacional de Bandas surge en 1995 por iniciativa de los directores de bandas de diversas regiones del país, con el objetivo de promover la riqueza musical y cultural de este tipo de agrupaciones, explica Cornelio Santamaría, director de la Banda de Tlayacapan.
Este evento anual se realiza en el centro de la comunidad en donde se realiza la presentación de conciertos al aire libre y en el que participan bandas de viento invitadas que representan a otros estados del país siendo anfitrión la Banda de Tlayacapan.
Con un variado repertorio de actividades de danza, teatro, videos, exposición y venta de artesanías de barro, este festival cuenta desde el año 2000, con un amplio programa de música popular, tradicional y antigua que se organiza en el marco de la Feria del Barro como un homenaje a los artesanos locales y del país.
La Banda de Tlayacapan tiene sus orígenes a mediados de 1870 bajo la dirección de Vidal Santamaría, formada en ese tiempo por amigos y familiares. Durante la Revolución tuvo el honor de haber acompañado al Gral. Emiliano Zapata.
El director en esa época fue Cristino Santamaría, hijo de Vidal, tuvo el grado de coronel zapatista. La banda crece y se fortalece bajo la batuta de Brígido Santamaría que siguió siendo su maestro y director hasta 1975. Don Brígido fue un músico talentoso, dominó varios instrumentos, formó bandas de música en varios pueblos en el estado de Morelos al mismo tiempo que transmitía sus conocimientos musicales a sus hijos y sobrinos. Además a él se le atribuye la notación musical de la danza delos chinelos, los sones y jarabes para los toros y de la música fúnebre.
De acuerdo con información revisada en https://dokumen.tips/documents/la-banda-de-tlayacapan.html, la Banda de Tlayacapan tiene ocho producciones discográficas que contienen una gran variedad de música tradicional y popular. Además ha participado con temas en otras producciones. Ha grabado música para cine y televisión.
A través de los años, La Banda de Tlayacapan se ha consolidado como una de las instituciones culturales más representativas del estado de Morelos, encargada de preservar, promover y difundir la música tradicional morelense a nivel estatal, nacional e internacional. Gracias a éste trabajo, su trayectoria, su historia y su tradición, la han llevado a ser merecedora con la Venera “José María Morelos y Pavón”, reconocimiento otorgado por el Gobierno del Estado de Morelos en 1997 y el “Premio Nacional de Ciencias y Artes 1998” que es el máximo reconocimiento que la Presidencia de la República otorga con la intención de promover el desarrollo cultural, científico y tecnológico mexicano, entre otros reconocimientos más.
En sesión solemne del Consejo Universitario celebrada en el auditorio General Emiliano Zapata Salazar del Campus Chamilpa de la UAEM, se otorgó el Doctorado Honoris Causa a La Banda de Tlayacapan por su loable labor para preservar y difundir la música tradicional morelense a nivel estatal, nacional e internacional.
Sin duda la música popular es un medio de promoción del turismo nacional e internacional, por lo que además de conocer las raíces de nuestras comunidades nos permite disfrutar de otra manera los atractivos de cada lugar, apreciar con música la arquitectura y diseño de los pueblos, sentir la calidez y buen trato de sus habitantes conociendo historias y observar el México amable.
Valdría mucho retomar lo que en 2018 hizo la Organización Mundial del Turismo (OMT), en colaboración con Procolombia y Sound Diplomacy, de integrar la primera guía en el mundo dedicada a la música y al turismo.
Si bien la OMT lo hizo con motivo de la feria de turismo World Travel Market, en Londres (Reino Unido), con el título Music is the New Gastronomy (La música es la nueva gastronomía), en Morelos se puede hacer algo similar al libro blanco que analiza y define la relación que existe entre la música y el turismo pues ambos sectores superan el crecimiento económico mundial.
Mtro. Salvador Rivera Díaz
Profesor de la Escuela de Turismo UAEM