Antes de hacer clic con tu teléfono celular e inmortalizar tu figura en las redes sociales, piensa dos veces la pose a elegir para verte bien.
Makati City en Filipinas es conocida como 'La capital mundial de las selfies,' seguida por Manhattan y Miami. Después de investigar 400 mil imágenes subidas a redes sociales con el hashtag "#selfie”, la revista Time determinó que la mayoría venían del país asiático. Determinar por qué es así es impreciso y complicado, lo cierto es que los autorretratos son uno de los fenómenos más populares en plena era de las redes sociales: involucran una serie de cuestiones psicológicas, de autopercepción y de reconocimiento social dignas de un libro entero.
Son las mujeres las que en mayor medida echan mano de este recurso con diferentes propósitos: desde captar momentos especiales en compañía de sus amigos o familiares, hasta mostrar a su audiencia los avances que va teniendo su cuerpo gracias al ejercicio o la ropa que acaban de comprar. Pero es, sobre todo, el ánimo de mostrar un estilo de vida determinado lo que conduce a las personas a hacerse selfies.
Tal vez sean pocas las personas que se han salvado de ser parte de una de estas fotografías que a algunos atrapan por sorpresa o de manera deliberada. Si te gustan las selfies, procura elegir los ángulos correctos y las mejores poses para que luzcas bien en ellas y valga la pena el esfuerzo de dedicar horas a subirlas a tus redes sociales. Aquí te decimos cuáles son las maneras que debes evitar a toda costa.
Ellas:
Con carita de animal
Tal vez a tu círculo cercano de amistades que se tomen el mismo tipo de selfies, les parezca simpático verte convertida en un perrito, conejo o algo así, pero viéndolo con objetividad estos efectos son bastante infantiles y su novedad ya pasó hace algunos meses.
- Sacando la lengua
Aparte de que ya no es nada original, puede hacer que tu rostro luzca grueso o antiestético. Además ¿qué atractivo tiene mostrar tu lengua al mundo?
Con las mejillas apretadas por alguien más
Parecerá que te están regañando o que sufres de maltrato de pareja. Si además tu ceño sale fruncido, los demás pensarán que tu actitud hacia el mundo es de total desagrado.
Falsamente infantil o inocente
Esto es un poco parecido a los trajes: las poses infantiles mordiendo tu dedo como si fueras una niña regañada ya no son originales y te harán ver como si padecieras el síndrome de Peter Pan.
Falsamente sorprendida
Siempre será mejor un aspecto natural y relajado en tus imágenes personales en lugar de esos rostros que no utilizas ante nadie más. Es hora de sacar lo que verdaderamente hay en ti.
