Hay pocos sabores que definen tanto a la comida mexicana como el picante. Nos encanta agregar chile a nuestras preparaciones, algunas veces incluso al extremo de hacernos sudar, llorar y a costa de que nos duela el estómago después.
Los chiles son frutos comestibles de las plantas del género Capsicum y existen más de 25 variedades. La capsaicina en los chiles no solamente aporta las notas picantes a la fruta, también tiene beneficios a la salud. Estos son algunos de los que la ciencia ha descubierto.
Pérdida de peso
Evidentemente el chile por sí mismo no conseguirá que bajes de peso si no cuidas tu alimentación y te ejercitas, pero varios estudios han demostrado que inhibe el apetito e incluso te ayuda a quemar calorías porque aumenta la temperatura corporal y acelera el metabolismo.
Te hace vivir más
Un estudio realizado por científicos de Harvard y la Academia China de Ciencia Médicas en 500,000 personas de China descubrió que quienes comían picante de cinco a seis veces a la semana tenían 14% menos de probabilidades de morir prematuramente.
Salud cardiovascular
Otros estudios han demostrado que la capsaicina del chile puede ayudar a la salud del corazón. En el libro Heal Your Heart: The Positive Emotions Prescription to Prevent and Reverse Heart Disease, el profesor en medicina cardiovascular, Micheal Miller, explica: “la capsaicina dilata a las venas y arterias, esto ayuda a reducir la presión sanguínea y prevenir los coágulos. “
Ayudan al sistema inmunológico
Debido a su alto contenido de la vitamina antioxidante C pueden promover la función inmunológica y ayudan a la cicatrización. Además son altos en contenido de vitamina B6, K1, A, potasio y cobre.
Efectos analgésicos
Existen cremas y geles con capsaicina que pueden inhibir el dolor. Esto está relacionado con la sensación picante que sentimos al comer chile, sucede cuando la capsaicina se une a los receptores de dolor, esto causa la sensación del picante. Tras la sensación inicial de picante y calor, las neuronas sobre estimuladas inhiben la sensación de dolor. Este dolor también va seguido de liberación de endorfinas y opioides en el cerebro, por eso está relacionado con el placer.