La flor de calabaza es un ingrediente muy versátil y, aunque en la mayoría de las preparaciones actuales es común rellenarla con queso ricotta y freírla, hay otras formas de prepararlas usando poco menos de aceite.
Aquí algunas ideas para variar tus comidas y darles un toque fresco.
Pizza
Los toppings de pizza pueden ser tan diversos como la imaginación de quien los elija. Así que te sugerimos poner un poco de flor de calabaza y combinarla con algún queso suave. La convertirá en la pizza perfecta para botanear. No dejes que se queme mucho, ya que su sabor y textura se pueden ver afectadas.
Pasta
Una buena opción para utilizar las flores que te sobraron, es incorporarlas justo antes de que que esté lista tu pasta, de esta manera no se estropean o cuecen de más. Quedan bien tanto en pastas con salsa de tomate como en salsas blancas como la bechamel.
Sopa
En México es común encontrar sopas de hortalizas que incluyen la flor de calabaza. Aportan mucho sabor, color y textura a la mezcla. Las puedes cortar y utilizar en sopas de fideo, verduras e incluso en caldos de pollo.
Al sartén
Otra buena opción para sacarles provecho es cocinarlas en el sartén con un poco de aceite de olivo, hongos, epazote, sal y pimienta. Es un guiso que puedes comer como acompañamiento en arroz y ensaladas, o bien para rellenar tacos y quesadillas.
Deshidratada
Debido a la creciente tendencia de deshidratar frutas y verduras, muchas marcas de botanas también sumaron a la lista a este tipo de flor. Las flores deshidratadas de calabaza quedan muy bien en ensaladas, helados y pasteles.