Ya tienes a tu hijo en los brazos y estas disfrutando de la maternidad… pero te viste en el espejo y tu cuerpo cambió y deseas recuperarlo.
Aunque no es tarea fácil, posible gracias a un poco de esfuerzo y sencillas actividades diarias.
Lo primero que debes hacer es aceptar que tu cuerpo sufrió una transformación y que ese proceso duró nueve meses. Por lo tanto, tu cuerpo, necesitará un mínimo de otros nueve meses, para volver a ser el que era.
Lo importante es no desesperarte e ir paso a paso.
Te explicamos cómo:
1.- No realices una dieta estricta
Las dietas estrictas generan estrés y esto a su vez influye en el peso.
Simplemente, come sano y que nunca falten en tu nevera opciones saludables para esos momentos de hambre como las manzanas, pequeños trozos de zanahoria y las galletas de trigo.
2.- Incluye en tu alimentación los considerados “súper alimentos”
Si estás amamantando, necesitarás prestar especial atención a tu alimentación. Elige alimentos ricos en nutrientes, como el pescado, que contiene omega 3, que además favorecerá a tu bebé a través de la leche materna. Otros alimentos que no debes dejar de lado son la leche y el yogur, por su alto contenido de calcio, ingrediente esencial para el fortalecimiento de los huesos. Además, incluye las proteínas presentes en las carnes magras y el pollo.
3.- Amamanta a tu hijo
La lactancia materna es una forma de conexión muy especial entre la madre y el pequeño; y que además, tu pequeño recibe nutrientes esenciales para su desarrollo. Amamantar a tu hijo ayudará a que pierdas peso más rápidamente, siempre y cuando, controles los ataques de hambre.
4.- No olvides la hidratación
Que nunca falte en tu día la ingesta de ocho vasos de agua, porque además de saciarte, contribuirán a acelerar tu metabolismo, y por lo tanto, te ayudarán a perder peso.
5.- Realiza actividad física
Es importante que encuentres el momento para realizar algún tipo de actividad física, que contribuya a la pérdida de peso después del embarazo. Es necesario que incorpores ejercicios aeróbicos e incluso, de entrenamiento de fuerza. No es necesario que concurras al gimnasio, puedes salir a caminar con tu bebé durante treinta minutos por el parque cercano a tu casa.
6.- Respeta las horas de descanso
Trata de aprovechar la máxima cantidad de tiempo para descansar, porque cuando estás muy cansada tu cuerpo libera una hormona llamada cortisol, que hace que sea más difícil la pérdida de peso.