Trabajar por unos glúteos de durazno, o al menos lo suficiente tonificados para sentirse a gusto con ellos, es sin duda una ardua y complicada tarea para muchas personas, tanto como para que todavía existan ciertos hábitos que hacemos todos los días que aplanan el derrière por el que tanto nos esforzamos, haciendo que todo ese ejercicio al final del día no valga tanto la pena.
Y con esto no queremos decirte que dejes de trabajar en tus glúteos o de hacer ejercicio, sino más bien que conozcas cuáles son dichos hábitos problemáticos para que los tomes en cuenta y además, conozcas cómo darles solución.
Pero antes, vale la pena mencionar que el perder masa muscular en el derrière no sólo es un problema estético, también podría ocasionar problemas en tu salud. De acuerdo con especialistas, como Daniel Bubnis, entrenador certificado y MD en ciencias deportivas quien explicó al sitio healthline, existe un una afección llamada síndrome de trasero dormido.
Este problema es ocasionado por debilidad en la zona de las glúteos, lo que genera dolores en la cadera, espalda y rodillas. La razón es que los flexores de la cadera se encuentran demasiado tensos por las posiciones estáticas que mantenemos todo el día, especialmente cuando estamos sentados por mucho tiempo o dormidos en posiciones inadecuadas.
Además, el entrenador menciona que los glúteos son el músculo que apoya a la zona de la cadera, así que la debilidad dejará una mayor carga en el aparato óseo pero, ¿por qué se aplanan los glúteos? Te explicamos.
Hábitos que aplanan los glúteos
1. Mantenerse sentado por mucho tiempo
Este es uno de los primero hábitos que peor aplanan los glúteos y que lamentablemente no muchas personas podemos evitar, principalmente por cuestiones laborales. Y lo que ocurre con esto es que la falta de actividad al pasar mucho tiempo sentado puede atrofiar los músculos de las piernas y glúteos, pues involucra una movilidad nula del cuerpo.
De ahí la importancia de hacer ejercicio para mantener el músculo activo, pero no solo eso, ya que también es recomendable levantarse de la silla cada media hora y caminar de cinco a 10 minutos, ya sea para tomar agua, comer algo o simplemente ir al baño. Esto pata activar la circulación en las piernas y glúteos.
2. Dormir en posición fetal
Son muchas las personas que duermen en esta posición pues resulta ser muy cómoda; sin embargo, simula la mala postura que el cuerpo tiene al sentarse por mucho tiempo, generando que los músculos continúen atrofiados incluso horas después de que la persona despertó.
Por ello, lo mejor es intentar acostarse con el cuerpo completamente estirado, sin flexionar las articulaciones, cuello ni espalda, así la espina dorsal y cadera descansarán de las posturas de todo el día.
3. No dormir lo suficiente
Aunque no lo creas, el dormir mal o poquito es otro de los hábitos diarios o comunes que aplanan los glúteos, aún haciendo mucho ejercicio, pues el cuerpo requiere de tiempo para repararse del daño sufrido en el día y eso incluye el desgaste provocado por la actividad física.
Pocas horas en la cama evitarán que tu organismo se recupere adecuadamente y eso retrasará el crecimiento de tus glúteos si te ejercitas. Y por supuesto que esto empeora si no haces nada de actividad, pues ocurrirá un tipo de “autocanibalismo”, donde tu cuerpo usará sus proteínas, grasas y químicos para mantenerse activo.