Lavar la ropa es una de las tareas básicas de todo hogar y es por eso que la lavadora se ha convertido en un electrodoméstico indispensable para la casa, pero quizá últimamente has notado que tu ropa ya no suele salir tan limpia como de costumbre o que un extraño aroma se ha impregnado en tus prendas, esto ocurre porque no le damos mantenimiento suficiente a este aparato. Por eso hoy te explicaremos cómo se debe limpiar el filtro de la lavadora y por qué hacerlo evitará malos olores.
Como cualquier otro electrodoméstico, la lavadora necesita de un mantenimiento que haga que podamos disfrutar de su uso por mucho más tiempo.
Se recomienda que cada dos o tres meses, o al menos un par de veces al año, limpies el filtro de tu lavadora a fondo, ya que así evitarás un mal centrifugado, malos olores y cualquier otro daño que a largo plazo pueda hacerla inservible. Tu ropa te lo agradecerá.
En esta pieza, una de las más delicadas y esenciales de tu lavadora, tiende a acumularse todo tipo de suciedad y puedes encontrar restos de jabón, pelusas y pelos que suelen quedar atrapados.
Y es que en efecto, su misión es servir de freno a esas fibras desprendidas de la ropa, así como cualquier otro objeto que se haya quedado olvidado en un bolsillo. Si estos restos llegan al desagüe podrían averiar la bomba de agua.
Paso a paso: así es como debes limpiar el filtro de la lavadora
Antes que nada recuerda desconectar tu máquina de la luz. Después hay que detectar dónde está el filtro de tu lavadora y eso dependerá si es de carga frontal o de carga superior.
Si es de carga frontal:
- Localiza el filtro y ábrelo con cuidado. Este suele estar en la parte inferior derecha de la lavadora.
- Abre la tapa y accede al filtro. Para evitar que el agua acumulada manche el suelo, coloca una toalla o un recipiente para recogerla.
- El proceso para extraerlo es bastante sencillo. Solamente hay que desenroscar, sacar, limpiar y volver a colocar.
- Limpia el agua y los elementos que puedan provocar la obstrucción. Puedes ayudarte de un pequeño cepillo para desincrustar lo más difícil.
- Pon a remojar el filtro en un en agua caliente con vinagre blanco por 30 minutos.
- Si tiene moho, deja el filtro a remojo en agua con lejía o con amoniaco (ten mucho cuidado con esta sustancias y recuerda utilizar guantes) durante 10 minutos.
- También aprovecha para limpia el lugar donde se acomoda el filtro.
- Enjuaga todo con agua tibia y vuelve a ponerlo en su luga.
Si es de carga superior:
- Localiza el filtro. Normalmente se ubica en el interior de la lavadora, junto al tambor. Deberás presionar una pestaña que sujeta el filtro para liberarlo.
- Abre el filtro para retirar todas las pelusas, pelos y demás restos de su interior.
- Ayúdate con un cepillo de cerdas suaves y abundante agua tibia para limpiarlo.
- Aquí también puedes utilizar una mezcla de agua con vinagre blanco y después limpiarlo con agua a presión.
- Incluso también puedes limpiarlo con agua a presión.
- Tras dejarlo limpio y reluciente, deja que se seque antes de devolverlo a su lugar.
También se recomienda cambiar el filtro de la lavadora en periodos de cada 6 o 12 meses. Las especificaciones pueden variar dependiendo de la marca y el modelo, así que siempre conviene leer el manual de tu electrodoméstico.