Hemos escuchado en todos lados que debemos tomar agua, y es verdad, pues el cuerpo está compuesto mayormente de líquido y es necesaria para poder vivir, pero esta creencia ha sido tan popularizada que podemos cometer el error de consumir de más y afectar nuestra salud, es por eso que hoy te revelaremos las señales de que has bebido más agua de la que necesitas y te está afectando.
No, beber más agua de la que tu cuerpo necesita no te hará adelgazar, tampoco te ayudará a depurarte rápido de una vida de malos hábitos, o hidratará tu piel luego de años de descuido, son muchas de las creencias que se tienen, además de que sentimos que debemos obligar a nuestro cuerpo a recibir dos litros de agua extra además de los alimentos, tés, cafés y demás, lo cual nos puede traer una sobrehidratación.
Muchas veces perdemos de vista que los alimentos también tienen agua, además de que consumimos otra clase de líquidos y no solo se trata de agua simple, por otro lado, la cantidad de agua que consumimos también dependerá de la actividad física que se realice.
Señales de que has bebido más agua de la que necesitas y te está afectando
Hiponatremia
De acuerdo con la Clínica Mayo, la “hiponatremia se produce cuando la concentración de sodio en la sangre es anormalmente baja. El sodio es un electrolito y ayuda a regular la cantidad de agua que hay dentro y alrededor de las células”, esto puede ser provocado por beber demasiada agua y hace que el sodio del cuerpo se diluya, los niveles de agua en el cuerpo aumentan y las células comienzan a hincharse.
Calambres o espasmos musculares
Es unos de los síntomas de la hiponatremia, es por ello que muchos deportistas consumen sodio durante sus jornadas de ejercicio.
Beber si no tienes sed
El mejor indicador para saber que necesitamos tomar agua es la sed, si nos obligamos a tomar agua aunque no la queramos, es un gran indicador de que estamos bebiendo agua de más. Los deportistas, los bebés, los ancianos y enfermos son los únicos a los que se les necesitan programar los momentos en los que la consumen.
Náuseas y vómitos
Cuando hay un exceso de agua en nuestro cuerpo los riñones ya no pueden eliminar el líquido y comienza a acumularse en el cuerpo, por lo que puede causas vómito, diarrea y náuseas.
Dolor de cabeza
Las células en los órganos se empiezan a hinchar cuando la sal en la sangre se diluye, por lo que aumenta el tamaño del cerebro y presiona contra el cráneo causando dolor de cabeza.
Coma y convulsiones
La presión intracraneal puede llegar hasta un punto demasiado peligroso, más allá de los dolores de cabeza puedes caer en coma o sufrir convulsiones e incluso la muerte.
Debilidad, somnolencia y fatiga
Los riñones comienzan a trabajar a marchas forzadas por el exceso de líquido, por lo que se produce una reacción estresante en las hormonas que dejan a ti cuerpo muy cansado.