El aceite de coco es un producto natural de origen vegetal que tiene gran prestigio en el mundo de la belleza. Es que sus propiedades hacen que este líquido para el cabello sea codiciado por miles de mujeres en todo el mundo, sin embargo es necesario saber cómo utilizarlo para no dañar el pelo. En pocas palabras te resumiremos cuál es el principal peligro de un uso incorrecto, dañando la cabellera.
El aceite de coco se obtiene a través del prensado y refinado de la pulpa de este fruto y se ha convertido en uno de los aceites favoritos en el terreno de la cosmética gracias cualidades hidratantes de sus componentes. Entre los ingredientes que contiene este cosmético está el ácido láurico al que se le atribuyen propiedades nutritivas, por eso puede ser un buen aliado para nutrir e hidratar tanto la piel como el pelo seco.
Aunque este producto de origen vegetal pueda llegar a ser muy beneficioso, no sucede así en todos los casos. En consecuencia, para obtener unos buenos resultados dependerá de cómo se utilice en el pelo. Es por ello que deberás tener en cuenta algunos consejos esencial para no dañar la cabellera.
Si tienes cabellos secos, será de gran ayuda para aportar esa hidratación extra que necesita este tipo de pelo, y siempre habrá que aplicarlo del medio hacia las puntas, nunca en la raíz. Y si se trata de cabelleras dañadas, es recomendado porque el cabello maltratado adquiere una mayor porosidad, motivando la acumulación del aceite y causando así un efecto de pesadez o incluso de pelo graso.
A su vez, es menester tener en cuenta que el aceite de coco que se aplique en el cabello deberá ser específico para uso dermatológico, recomendado por especialistas. El que se utiliza para cocinar no es apropiado para este fin, el motivo es que para el uso en el pelo debe haber sido sometido a una formulación específica para la piel.