La gastronomía mexicana se caracteriza por tener una infinidad de opciones en cuanto a platillos y recetas, muchos son los que nos hacen sentir como en casa, principalmente porque nos recuerdan aquellas épocas en casa de la abuela o en casa con mamá una tarde de sábado. Con el paso de los años, nos dimos cuenta que había algunos platillos que tomaban mucha más relevancia que otros y uno de esos resulta ser la pancita.
La pancita es reconocido como uno de las comidas mexicanas más emblemáticas que tenemos, no solo por su extraordinario sabor, sino por el valor que puede llegar a tener en nuestras vidas. Pocas personas nos dejaran mentir, que la pancita es ideal para disfrutar en cualquier comida, pero un domingo o un sábado por la mañana con resaca, ésta puede ser no solo la mejor opción, también nuestra salvación.
Debemos destacar cuando hagamos la pancita, que existen 2 tipos de pancita: la de libro y la de toalla.
Pancita libro: Tal como lo indica el nombre, tiene una textura muy similar a la de un libro, está quizá sería de las más populares que existen y de las más consumidas.
Toalla: Este tipo de pancita cuenta con una textura que se le asemeja a una toalla de algodón, que si bien es popular, en realidad, no es tanto como la anterior.
Pancita de res
Ingredientes
1k de panza de res
2 dientes de ajo
2 cdas de cebolla (finamente picada)
1 pedazo de cebolla
50g de chile ancho
50g de chile pasilla
1 tza de garbanzo (cocidos)
Preparación
- Lo primero que haremos será partir en cuadros la pancita, previamente limpiada, y la pondremos a cocer en una olla con suficiente agua, un diente de ajo, un pedazo de cebolla y una cucharada de sal.
- Dejamos hervir hasta que esté bien cocida.
- Deshebramos, tostamos ligeramente, remojamos en agua caliente y muela los chiles.
- Pondremos a freír la cebolla y el ajo, finamente picados, en dos cucharadas de manteca. Cuando la cebolla esté transparente agregamos los chiles molidos y dejamos freír ligeramente.
- Lo siguiente que haremos, será retirar el agua de la cebolla y el ajo. Añade los garbanzos cocidos y la pancita con su caldo.
- Dejamos hervir por 30 minutos y sazonamos con sal.
Listo, sirve disfruta. Puedes acompañar con unas tortillas.