El caldo tlalpeño es un tradicional platillo de la cocina mexicana que consiste en un caldo de pollo con vegetales y un puñado de garbanzos sazonados con una salsa de chile chipotle que le da un toque ligeramente picante, dulzón y ahumado que sobresale dentro de toda la preparación. Si su sabor te parece poco, también se suele acompañar de hebras de queso Oaxaca y rebanadas de aguacate.
Es una delicia que data su origen presuntamente en la alcaldía Tlalpan, ubicada al sur de la Ciudad de México (CDMX), pues se dice que se preparó en un centro nocturno ubicado en este territorio y que derivaría en "caldo de Tlalpan" y más tarde "tlalpeño". Sea, de dónde sea, su sabor es único y actualmente posiblemente es una de las preparaciones más replicadas en la cocina mexicana cuando se tratan de recetas ideales en los días nublados con un clima frío.
Para consentir a la familia en estos días que suelen ser nublados por la llegada del otoño, con la siguiente receta podrás hacer un delicioso caldo tlalpeño, verás que es muy rendidor y a todos dejará encantados con su sabor. Descubre cómo puedes hacerlo de forma casera.
Ingredientes:
1 pechuga de pollo
1.5 L de agua
3 jitomates
1 cebolla
3 dientes de ajo
5 ramitas de cilantro
2 zanahorias medianas
1 taza de ejotes
1.5 tazas de garbanzos cocidos
2 chiles chipotle de lata
Sal y pimienta negra molida al gusto
Para acompañar:
Queso Oaxaca al gusto
Aguacate
Limones
Preparación
Limpia bien el pollo, retírale la grasa y procura que esté sin piel con la pechuga partida por la mitad. Colócalo en una olla con el agua, ½ de pieza cebolla y el cilantro (previamente lavado y desinfectado), agrega sal al gusto y deja cocinar a fuego alto.
Después de unos 10 minutos retira la espuma y deséchala. Mientras en un pocillo grande agrega los jitomates ya lavados, deja a fuego alto hasta que se suavicen. Una vez listos, retira del fuego y espera a que se enfríen un poco.
Regresando a la olla, deja otros 10 minutos y agrega las zanahorias en cubitos (previamente lavadas y peladas), los ejotes en trozos pequeños y los garbanzos precocidos (sin piel).
Cuando la pechuga de pollo esté cocida, retírala, deja las verduras hasta que estén suaves y apaga. Una vez que se enfríe un poco el pollo, deshébralo y regresa al caldo, desecha la cebolla y reserva.
Luego de que los jitomates se hayan enfriado, pásalos a la licuadora con el resto de cebolla, los dientes de ajo, los chiles chipotle de lata y un chorrito de agua de la cocción del pollo, muele hasta obtener una salsa homogénea.
Coloca una cazuelita a fuego medio alto, agrega un chorrito de aceite vegetal y una vez caliente sirve ahí la salsa pasando por una coladera, agrega un poco de sal y pimienta negra molida y remueve.
Cuando haya cambiado de color la salsa, vierte en el caldo con el pollo y las verduras. Vuelve a poner a fuego medio bajo, espera a que dé un hervor para que todos los sabores se integren, rectifica la sazón y retira del fuego.
Sirve caliente, acompañado de queso Oaxaca, unas rebanadas de aguacate con un poco de jugo de limón y ¡a disfrutar de un delicioso caldo tlalpeño!.