El ajo es ese popular ingrediente de la cocina que sirve como un sazonador natural para darle sabor a la comida gracias a su único toque culinario que aporta. Sin embargo, también es empleado con otros fines como por ejemplo evitar o aliviar la gripe, la tos o el resfriado común.
Este remedio casero basa su efectividad en el uso tradicional que durante años se ha empleado de generación en generación, así como también se refuerza bajo la evidencia de pequeñas pruebas de laboratorio que muestran que el ajo posee propiedades antibacterianas y antivirales.
Las características de este alimento también hacen que sea un antibiótico natural que refuerza el sistema inmunológico contra este tipo de virus que suele ser muy común y la mayoría de las personas ha presentado. Utilizarlo como un remedio natural en casa puede ser muy sencillo y hasta económico.
Con la siguiente guía básica podrá saber cómo utilizar el ajo para la gripe o resfriado común y sepas la forma indicada de recurrir a este popular remedio que seguramente es uno de los más antiguos que existen.
Ajo para la gripe o resfriado común
Este remedio consta de dos formas, la primera: preparar una infusión de ajo, para ello corta tres dientes de ajo en pedacitos, ponlos a hervir 10 minutos con un litro de agua, deja reposar, cuela la infusión y toma con un poco de miel si no soportas el sabor tan fuerte del ajo. Disfruta de una bebida caliente que además es algo reconfortante para los bronquios.
La segunda forma consiste en tomar 1 o 2 dientes de ajo al día como medida de prevención para este tipo de enfermedades. Machaca un poco el ajo pelado si está muy grande y come crudo.
Las dos formas pueden agregar las propiedades del ajo para estas enfermedades, solo recuerda que no deben de evitar la consulta médica si esa gripe o resfriado es más fuerte de lo que parece. Recuerda que lo más importante es tu salud.