Se acercan las vísperas de Día de Muertos en México, días llenos de tradición y cultura en nuestro país con gran significado para la población.
Hay varias cosas que son esenciales para estas fechas, y no puede ser Día de Muertos sin las tradicionales calaveritas literarias. Este es su origen y los pasos para hacer una.
¿Qué son las calaveritas literarias?
Las calaveritas literarias son poemas que cuentan una historia alusiva a la muerte como un personaje, o bien, a la fecha festiva de Día de Muertos. Generalmente cuentan un relato cómico o gracioso cuando alguien tiene un encuentro con la muerte.
¿Cuál es el origen de las calaveritas literarias?
El origen de las calaveritas literarias se remonta a 1792, cuando Fray Joaquín Bolaños escribió La Portentosa Vida de la Muerte, un relato censurado por muchas personas importantes de la época como José Antonio Alzate, que, al igual que con la obra de Bolaños, fue gran crítico de 'El Periquillo Sarniento' de Lizardi. A mediados del siglo XIX comenzaría a tomar la forma en la que conocemos hoy en día a la calaverita literaria, cuando la prensa publicaba este tipo de textos criticando a la alta sociedad por sus intentos de parecerse a la clase élite de Europa.
¿Cómo hacer calaveras literarias?
Si quieres redactar uno de estos poemas tradicionales de Día de Muertos debes saber primero que se dividen en inicio, desarrollo y final, mantienen una regla básica que es escribirse en estrofas de solo cuatro renglones. Debes primero imaginar o planear una historia de un personaje o una persona que tendrá un acercamiento con la muerte en tu calaverita.
Para esto te recomendamos que tengas preparadas varias palabras relacionadas a la muerte como, por poner ejemplos, calaca, flaca, huesuda, huesos, flores, etc.
Trata de ser descriptivo con tus personajes, especialmente al principal (que no es la muerte) destacando características o formas de actuar específicas de la persona y así, poder crear algo gracioso en el poema.
Los lugares que menciones también serán importantes, tu personaje debe frecuentar ciertos lugares, utilízalos. En la historia debes crear un escenario que sea alusivo al Día de Muertos.
Trata de que cada uno de los renglones o versos de tu poema sean más o menos de la misma extensión y rimen entre ellos. Si tienes una estrofa de 4 versos, la rima puede aplicar en tres formas: que el primero y cuarto rimen, y el segundo y tercero también, o que los dos primeros tengan una rima y los últimos dos otra. La última manera es que el primero y el tercero rimen, así como el segundo con el cuarto.
Trata también de que los versos contengan la misma cantidad de sílabas, el número va de las 8 a las 10 sílabas, aunque puede variar una más o una menos, es decir, de 7 a 11 sílabas. Por último, no tengas miedo a escribir, es el momento para que te sueltes y dejes volar esa imaginación.