La chaya, también conocida como espinaca maya es una planta nativa del sureste de México, arbusto que podemos encontrar especialmente en estados como Tabasco y la península de Yucatán, llega a crecer en países como Guatemala, Belice y Honduras, así como en África y Nigeria.
De nombre científico, la chaya es conocida como Cnidoscolus chayamansa, esta planta aporta muchos beneficios al organismo, ya que contiene gran cantidad de vitaminas, minerales que son esenciales para el cuerpo. Incluso, se menciona en el portal del Gobierno de México, que la chaya contiene más nutrientes que hortalizas como acelgas o espinacas, dentro de sus ventajas posee un alto contenido de fibra.
Consumir las hojas de chaya en su gran mayoría se acostumbra sea crudas, en bebidas o ensaladas, se le han atribuido diferentes beneficios entre los que destacan, la chaya ayuda a regular los niveles de azúcar en la sangre y a regular la presión arterial. Consumirla en bebida garantiza la recuperación de energía y tener efectos antiestrés.
Sin embargo, Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural señala que se debe tener especial cuidado al consumir la chaya, sus hojas se deben consumir crudas y en pocas cantidades para realizar una preparación en agua, menciona que “de preferencia se debe consumir cocida, pues contiene una sustancia tóxica similar al cianuro que se inactiva fácilmente cocinando las hojas antes de ingerirlas”, así lo refiere en el portal web. Para aprovechar de todos los beneficios de esta hoja, te dejamos la receta para prepares agua fresca.
Agua de chaya
Ingredientes
5 hojas de chaya
1 lt de agua
½ taza de azúcar
Hielo
Jugo d limón (opcional)
Preparación
Comienza por lavar perfectamente las hojas de chaya y trozarlas en tamaños pequeños. Reserva.
Llévala a la licuadora junto con el azúcar y dos tazas de agua.
Cuela y sirve en una jarra con el resto del agua natural.
Añade hielo al gusto y prueba de dulzor, si es necesario agrega un poco más de azúcar.