Cuando pensamos en calabazas, generalmente imaginamos su deliciosa pulpa o las decorativas calabazas talladas de Halloween. Sin embargo, dentro de esa pulpa se encuentran las semillas, que a menudo son descartadas sin considerar todo su potencial culinario. ¡No las tires! A continuación, te presentamos algunas de las formas en las que puedes aprovechar al máximo las semillas de calabaza en tu cocina.
Beneficios de las semillas de calabaza
Las semillas no solo conservan los beneficios nutricionales de la calabaza, sino que también ofrecen propiedades propias que merecen ser destacadas:
Contienen vitaminas A y B, carotenoides, magnesio, manganeso, zinc, pectinas y cucurbitina. Esta última es conocida por ayudar a prevenir el agrandamiento de próstata.
Según el portal "El Poder del Consumidor", las semillas son ricas en omega-3 y fibra, esenciales para la salud cardiovascular. Estos componentes ayudan a disminuir la presión alta y otros problemas cardíacos.
Son una excelente fuente de zinc, un mineral que fortalece el sistema inmunológico y regula los niveles de glucosa en sangre.
Aportan antioxidantes y son bajas en calorías. Por tanto, en lugar de desecharlas, deberíamos pensar en formas creativas de incluirlas en nuestra dieta.
4 formas de utilizar las pepitas de calabaza en la cocina
Como snack o botana
Las semillas, ya sean crudas o tostadas, son una excelente opción para picar entre comidas. No solo satisfacen ese antojo vespertino, sino que también aportan un impulso nutricional.
Bebida caliente (té e infusión)
Una infusión hecha con semillas de calabaza puede ser reconfortante y deliciosa. Endulza con un poco de miel para obtener una bebida dulce y llena de beneficios.
En ensaladas o como topping
Las semillas aportan un toque crujiente a las ensaladas y otros platos. También pueden ser el complemento perfecto para cremas o sopas.
Decoración de postres
Gracias a su distintivo color verde y forma, las semillas pueden ser el toque final en postres, especialmente aquellos que llevan calabaza como ingrediente principal.
Aunque es posible consumir las semillas con cáscara, algunas personas pueden encontrarlas un poco pesadas debido a su alto contenido de fibra. Lo importante es experimentar y encontrar la forma que más te guste de incorporar estas semillas en tu dieta.
Ahora que conoces todo lo que puedes hacer con las semillas de calabaza, ¡intégralas en tu cocina y disfruta de sus beneficios y sabor!