La temporada navideña trae consigo un ambiente lleno de magia y tradición, y qué mejor manera de celebrarlo que con un árbol de Navidad natural en tu hogar. Si este año has optado por uno natural, sigue estos consejos para mantenerlo fresco y vibrante durante más tiempo.
Elige Sabiamente tu Árbol
Primero, selecciona un árbol con ramas verdes y brillantes. Evita aquellos con agujas marrones o secas. Un árbol fresco también se caracteriza por su fragancia agradable.
Un Corte para la Frescura
Como sugiere la Asociación de Árboles de Navidad de Minnesota (MNCTA), haz un corte de unos 3 centímetros en la base para abrir el tallo, facilitando la absorción de agua.
Ubicación Adecuada
Mantén tu árbol alejado de fuentes directas de calor como estufas, calefacciones o ventanas con exposición solar directa para evitar la pérdida rápida de humedad.
Riego Regular
Un árbol de Navidad recién cortado puede consumir hasta 3 litros de agua en 24 horas. Verifica diariamente el nivel de agua y asegúrate de que nunca esté por debajo de la base del tronco.
Evita Remedios Caseros
Contrario a la creencia popular, aditivos como jugo de naranja o agua con azúcar pueden disminuir la retención de humedad del árbol.
Iluminación LED
Opta por luces LED, ya que generan menos calor y reducen el riesgo de incendios, además de evitar la pérdida excesiva de agujas.
Cuidado con los Cambios de Temperatura
Evita cambios bruscos de temperatura y protege el árbol de vientos fuertes y exposición directa al sol.
Con estos cuidados, tu árbol de Navidad natural no solo embellecerá tu hogar sino que también conservará su frescura y belleza durante toda la temporada festiva. ¿Y tú, prefieres los árboles de Navidad naturales?