La terapia de desensibilización y reprocesamiento mediante movimientos oculares (EMDR), avalada por la Organización Mundial de la Salud desde 2013, está ganando reconocimiento como una herramienta eficaz para procesar traumas del pasado y mejorar el bienestar emocional en el presente. Pacientes y psicólogos han compartido sus experiencias con esta terapia, destacando cómo ha transformado su forma de enfrentar recuerdos dolorosos y cómo ha influido positivamente en sus vidas.
Elena P., una paciente que llevaba años en terapia cognitivo-conductual, decidió explorar emociones persistentes que afectaban su vida diaria mediante EMDR. Aunque inicialmente le costó conectar con esos sentimientos, con el tiempo logró identificar y reprocesar eventos que habían dejado cicatrices emocionales profundas. "El recuerdo sigue ahí, pero ya no duele", explica, agradeciendo el autoconocimiento que ha ganado a través de este proceso.
El EMDR funciona mediante la estimulación bilateral del cerebro, ya sea a través de movimientos oculares, sonidos o toques, lo que facilita la conexión entre los hemisferios cerebrales y permite reprocesar los recuerdos traumáticos. Según Vicente Alcántara, psicólogo experto en EMDR, este método ayuda a "guardar los recuerdos en el cajón correcto", aliviando la carga emocional que estos pueden causar en la vida cotidiana.
Además del EMDR, existen otras terapias como la somática, sensoriomotriz y de Sistemas de Familia Interna que también se utilizan para tratar traumas, especialmente aquellos relacionados con vínculos afectivos y disfunciones en el apego.
Aunque el proceso de abordar traumas puede ser emocionalmente desafiante, los pacientes como Alberto Ruiz destacan los beneficios de enfrentar y sanar esas heridas. "Es como tener una segunda oportunidad para enfrentarte a ellas de otra forma", afirma Ruiz, quien ha aprendido a ser más compasivo consigo mismo gracias a esta terapia.
Los expertos advierten que, aunque la terapia puede ser transformadora, es importante estar preparado emocionalmente y contar con un entorno seguro en el presente para abordar el trauma de manera efectiva.