En 1993 una moneda de cincuenta centavos se puso en circulación a través del Banco de México. Esto se debió a un cambio en la unidad monetaria.
Con el paso de los años se supo que algunas de estas monedas tenían errores de acuñación, lo que las convirtió en piezas únicas y extrañas que hoy se cotizan entre los coleccionistas entre tres y cuatro mil pesos.
Las monedas en cuestión pertenecen a la familia B de los llamados “Nuevos Pesos” que entraron en vigor en 1992 cuando al peso mexicano se le retiraron tres ceros.
¿Por qué cuestan tanto dinero?
Debido a que las monedas de cincuenta centavos de la familia B se encuentran en proceso de retiro se han vuelto objetos codiciados por muchos, ya que a pesar de ser aceptadas en transacciones cotidianas, una vez que lleguen al banco no serán entregadas de nueva cuenta al público.
Están fabricadas en bronce y aluminio, su diseño muestra la cifra de cincuenta centavos y están decoradas con el Anillo de la Aceptación de la Piedra del Sol.
Entre los errores más destacados e importantes para los coleccionistas está el del año, pues a pesar de que la moneda circuló desde los inicios de la década de los 90, algunas tienen marcado un 1983 y otras un 1893 a consecuencia de una equivocación con el troquel. En distintos casos, el número tres aparece roto.
Si tienes una de estas monedas o estás interesado en adquirirlas, hay muchas opciones de internet que te permitirán adquirirlas.