Con el fin de evitar el “desgaste acelerado” de sus uniformes, los soldados adscritos a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), de su propio dinero deberán comprar un colorante de la marca Mariposa color verde ultramar 667, que tiene un costo aproximado de 30 pesos, para así, recobrar las tonalidades verdes, mantenerlos utilizables los próximos nueve meses y, de paso, “elevar la moral de los elementos”.
En un oficio que se difundió a través de la cuenta de la página web llamada defensa.com, en una nota periodística firmada por el reportero Jorge Alejandro Medellín, da cuenta del contenido de la circular.ç
El pasado 17 de mayo, el general del Arma de Infantería, Carlos Cesar Gómez López, envió el oficio al comandante de la Primera Región Militar del País (I RM), el general Juan Arturo Cordero Gómez, para informarle sobre una posible solución al problema de los uniformes desgastados.
El texto, de dos cuartillas, señala que dichas medidas son en respuesta a la política integral de austeridad y erradicación a la corrupción, a través del ejercicio con honestidad y transparencia con los recursos asignados a la Sedena.
Indica que las múltiples actividades operativas que realizan las tropas, aunado a las inclemencias climatológicas adversas, provocan que el desgate de los uniformes sean más rápido que lo normal.
Analiza:
“La permanente observación y atención de la sociedad y los medios de comunicación en las actividades que realiza el Ejercito Mexicano, en donde constantemente aparece el personal militar en reportajes portando uniformes decolorados, lo cual va en detrimento de la imagen institucional”.
Por ello, esta dependencia planea proponer al alto mando una solución inmediata para contrarrestar el efecto negativo provocado por el empleo de uniformes deteriorados por parte del personal militar, encontrando una posible medida, que es el teñido a mano de los uniformes de campaña tipo selva de tela pixelada ripstop, por medio de una pastilla colorante que proporciona un color que se asemeja al que presenta un uniforme nuevo.
Sobre la pastilla colorante, menciona que se realizó una búsqueda en el mercado de diversas pastillas para buscar el teñido que se acercara al color original de un uniforme de reciente ministración, encontrando que la pasilla de la marca Mariposa, color “verde ultramar 667”, fue la que más se aproximó al color de dicho uniforme.
Por lo tanto, el oficio es muy preciso en las recomendaciones que los soldados deben de seguir antes de teñir el uniforme:
- Uno, verificar que el sobre del producto con el que se va a teñir el uniforme sea de la marca Mariposa color verde ultramar 667.
- Dos, un sobre completo de la marca mariposa color verde ultramar 667 se disuelve en un recipiente con medio litro de agua hirviendo.
- Tres, en un segundo recipiente se coloca suficiente agua hirviendo para cubrir completamente el uniforme (pantalón y guerrera) y se agrega el medio lito de agua en donde se disolvió la pastilla.
- Cuatro, vaciar el medio litro de agua hirviendo con el colorante en el segundo recipiente.
- Cinco, lavar y secar el uniforme.
Una vez concluidos los pasos anteriores, se indica que, durante el teñido del uniforme, deberán de seguirse las siguientes recomendaciones:
- Mojar bien la prenda (la cual debe de encontrarse limpia), y colocarla dentro del recipiente con colorante.
- Luego mover constantemente durante diez minutos para asegurar un teñido igual.
- Posteriormente deberá dejar transcurrir 45 minutos aproximadamente después de haber remojado la prenda y posteriormente enjuagarla en “agua de uso corriente”, hasta que deje de tirar el excedente de colorante.
- Deberá de secar el uniforme bajo la sombra, sin exprimirlo y posteriormente plancharlo, concluyen las indicaciones.
Por lo antes expuesto, el mando militar asegura que la opción de teñir la ropa traerá grandes beneficios que enumera:
El procedimiento de teñido de uniforme y su contribución a mejorar la imagen institucional, optimizar los recursos materiales y elevar la moral de las tropas.
Considera que el tenido no representa un gasto excesivo que impacte de ningún modo en la economía del personal militar, ya que el costo de la pasilla colorante es de aproximadamente 30 pesos.
Además, la obtención del colorante es muy común en cualquier centro comercial o ferretería del país.
Permite, prolongar el tiempo de vida útil de los uniformes sin perder el color y textura, la cual adquiere después del teñido, y contribuye a una mejor presentación del personal militar en las actividades operativas y administrativas.