El tradicional momento del lanzamiento del ramo de novia se convirtió en un fenómeno viral gracias a un peculiar video en TikTok. En el clip, una invitada intenta evitar ser alcanzada por el ramo alejándose del centro de la pista de baile. Sin embargo, contra todo pronóstico, el ramo cae directamente en sus manos, causando risas y un sinfín de comentarios divertidos en redes sociales.

El video fue compartido por la usuaria @luciana.banana9, quien documentó la escena con un toque humorístico. En las imágenes, Luciana se aparta intencionalmente mientras otras mujeres esperan emocionadas el lanzamiento. Para sorpresa de todos, el ramo desciende con precisión hacia ella, atrapándolo accidentalmente.

"Fue como si el ramo supiera exactamente a quién debía ir",

comentó una de las asistentes en tono de broma, mientras otros hacían chistes sobre su "futuro matrimonio".

El video alcanzó rápidamente los 1.8 millones de reproducciones en menos de 48 horas, y los usuarios de TikTok no tardaron en reaccionar con comentarios como:

“El ramo: te vas a casar y te va a gustar”

o “La ley de Murphy en todo su esplendor”.

Los mensajes reflejaron la reflexión sobre el destino y el humor que generó este momento tan inesperado.

El lanzamiento del ramo es una tradición muy conocida, especialmente en bodas occidentales. Esta costumbre tiene su origen en la Edad Media, en Inglaterra, cuando las mujeres solteras intentaban arrancar pedazos del vestido de la novia para atraer la buena suerte. Con el tiempo, esta práctica evolucionó hasta convertirse en el lanzamiento del ramo, uno de los momentos más esperados en muchas bodas.

Aunque para algunos es solo una divertida tradición, el ramo sigue siendo un símbolo cargado de emoción y expectativas, especialmente cuando, como en el caso de Luciana, parece desafiar cualquier intento de evitarlo.

Luciana, por su parte, no ha confirmado si el ramo marcó un giro en su vida amorosa, pero reconoció que jamás imaginó que su intento de esquivar la tradición la pondría en el centro de atención. El ramo sigue cumpliendo su misión: provocar risas, emociones… y tal vez, algo de destino.