Discapacidad Motriz 45.3
Discapacidad Auditiva 15.7
De lenguaje 4.9
Visual 26.0
Mental 16.1
Otra 0.7
Esta situación, muy preocupante, es de tomarse más en cuenta en el ámbito de las tecnologías de la información, ya que, de acuerdo a la misma fuente un 64 por ciento de las personas con algún tipo de discapacidad en México está dentro del rango de edad de los 0 a los 64 años, es decir, en su mayoría están en el rango de edad de personas que más utilizan alguna tecnología de información. Del total de las personas con algún impedimento, es importante mencionar que el 52 por ciento son hombres y el resto mujeres. Cerca del 40 por ciento de las personas con discapacidad son los jefes de sus hogares, pero solamente un 25 por ciento de los discapacitados en edad de participar económicamente lo hace. Las personas con capacidades diferentes se enfrentan a muy diversos problemas en su vida diaria. Por citar un ejemplo, a pesar de que en Durango, México, existe un reglamento de transportes que obliga a los concesionarios del transporte público a que cuenten con elevadores para sillas de ruedas, hasta la fecha, ningún camión urbano o suburbano cuenta con este tipo de dispositivos. A esto podemos agregar la escasez de rampas y facilidades para personas en sillas de ruedas en algunos lugares públicos, por ejemplo, en cierta universidad privada de Morelos, no existen rampas para acceder al centro de cómputo, estación de radio y televisión, piso digital (donde se llevan a cabo las prácticas de fotografía, edición de audio y video de la carrera de ciencias y técnicas de la comunicación y el taller de serigrafía de la carrera de diseño gráfico), y cocina (donde hacen sus prácticas los alumnos de las licenciaturas de nutrición y administración de empresas turísticas); esto en lo que concierne a los discapacitados motrices.
Para hablar de los discapacitados visuales, desafortunadamente la ciudad de Cuernavaca, no cuenta con muchos espacios públicos accesibles. Por citar algunos ejemplos, los teléfonos públicos cuyas cabinas están soportadas únicamente por un lado representan un obstáculo para los que usan bastón, ya que la mayoría de las ocasiones al no detectarlas desde el suelo, se topan con ellas, sucede lo mismo con los cables que sostienen muchos postes en la vía pública. A esto podemos sumarle la ignorancia con que se actúa contra los discapacitados visuales. Podemos citar que no se tienen perros guía.
Mención aparte merecen las librerías de la ciudad, ya que ninguna tiene a la venta libros en sistema braille o audiolibros, con excepción de Vips, que a la fecha tiene a la venta 1 solo título en formato de audio, cuyo precio ronda los 500 pesos (y es de corte infantil, y Sanborn’s, donde se tiene a la venta una conferencia (no un libro) en CD de audio de Carlos Cuahutémoc Sánchez. Cabe destacar, que en el caso de la librería Cristal, la empleada ni siquiera conocía la existencia del sistema braille y externó su duda sobre si el braille era el autor de algún libro. De todos los establecimientos formales de alimentos y bebidas en la ciudad, únicamente Vips tiene menú en braille, limitado a una sola carta. Esto aplica también a personas con capacidades cognitivas, por ejemplo, no se cuentan con cursos o capacitación para tratar con alumnos con discapacidades.
En el ámbito laboral, los discapacitados no corren mejor suerte, ya que, de acuerdo a datos publicados en INEGI, únicamente 25 personas discapacitadas en edad productiva de cada 100 tienen empleo. Esto pone en evidencia la discriminación que sufren. Encontramos también sitios, donde algunos hipervínculos, especialmente de publicidad (banners), cambian constantemente o se mueven por la pantalla, dificultando bastante la navegación a usuarios de movimiento limitado. Aquí cabe destacar que tanto los usuarios ciegos, débiles visuales y de movimiento limitado no utilizan ratón para navegar, sino métodos abreviados del teclado, entonces, si el programador no habilita en el código fuente o el archivo swf del sitio la opción de desplazamiento por tabulador, este tipo de usuarios no podrán navegar en él. Así también, son pocos lo sitios que agregan atributos ALT, es decir, de texto alternativo, esto ayuda mucho a las personas que usan software text to speech y a quienes tienen deshabilitada la carga de imágenes en sus navegadores, aunque no sean personas discapacitadas. Algunos otros sitios dificultan la navegación a usuarios con discapacidades cognitivas o débiles visuales debido a las deficiencias en el diseño gráfico.
Llama la atención también el caso de las discapacidades auditivas, especialmente en contenidos multimedia tales como videos que se pueden descargar, ya que, es raro encontrar este tipo de contenidos con posibilidad de activar subtítulos, con lo que se facilitaría la visualización para los usuarios con este tipo de discapacidad, o una transcripción a texto del contenido del archivo de audio o video.
Esta situación es preocupante debido a que internet es una fuente muy importante de información, además de una vía de comunicación de uso bastante extenso, además de que es una fuente significativa de diversión, y los discapacitados, al no poder acceder debidamente a ella, sufren de cierta forma discriminación. Que podemos decir de las personas adultas mayores, que no tienen acceso a tomar cursos “económicos” para aprender computación y no tienen ni computadora en casa, ni personas que se dediquen a enseñarles lo más mínimo en la computadora para, al menos, comunicarse con los hijos o nietos que están lejos.
Se requiere de ayuda de las instituciones y universidades, para que puedan estar a su alcance este tipo de cursos.
Hacemos una invitación, para el próximo foro para personas adultas mayores que se llevará a cabo el día 22 de junio en el club de Leones, ubicado en avenida Morelos de esta ciudad, de 10 de la mañana a 2 de la tarde, para que se acerquen a exponer, en diversas mesas de trabajo, lo que realmente los mayores necesitan.